Maverick Viñales es, sin duda, uno de los grandes nombres de la temporada 2024 de MotoGP, al menos hasta el momento. El piloto español ya avisó de su potencial ganando la carrera al sprint de Portugal, para después brillar con luz propia en Estados Unidos, al vencer tanto en la prueba corta del sábado como en la larga del domingo, lo que le encumbró como el primer piloto en ganar con tres marcas distintas en la era moderna de la categoría reina.

El de Aprilia llegó por todo lo alto a Jerez, pero una mala posición de salida en la parrilla le condicionó para el resto del fin de semana, aunque también tuvo un problema en su moto. Es por ello que Viñales buscará redimirse este fin de semana en el Circuito Bugatti de Le Mans, una pista que no se le ha dado históricamente mal (ganó en 2017 tras un duelo con Valentino Rossi en el que el italiano acabó cayéndose), y a la que llega con una confianza cada vez mayor.

El propio piloto de Roses lo confirmó este jueves en su llegada a Francia, para la quinta cita de la campaña, detallando que espera mucho de ella: "Cada carrera que pasa me siento con más confianza y más crecido dentro de Aprilia", empezó diciendo.

"Siempre que llego a Le Mans estoy sereno. Me veo muy bien; estoy rejuveneciendo. Aquí he hecho carreras épicas. Una batalla contra tu ídolo, en el caso de Rossi, y encima ganarle, pues es algo único [sobre lo que pasó en 2017]. Lo mismo que mi primera victoria en el Mundial, contra Nico Terol (125cc)".

De esta forma, Viñales sabe que será rápido en Le Mans, aunque tendrá que pulir cosas, especialmente en clasificación: "Este es un circuito en el que ya sé que voy a ir rápido, que el ritmo lo tendré. Pero llego con la predisposición de trabajar y construir un fin de semana bueno. Sobre todo, en la cronometrada. Menos Qatar, todos han sido circuitos en los que hemos estado bien".

De hecho, el #12 volvió a hacer hincapié en que fue la 'qualy' lo que le lastró en el Gran Premio de España: "En Jerez, de haber salido delante, todo habría sido distinto. Nuestra prioridad tiene que ser eso, la cronometrada".

Por último, Maverick habló de cómo se encuentra con la RS-GP de 2024, un 'feeling' que también sigue subiendo a medida que pasan los grandes premios: "Todavía nos falta poder frenar con la moto inclinada. Pero estamos mucho más en el sitio que antes", finalizó.