Quién durmió mejor anoche tras el GP de Canadá de F1: Andrea Kimi Antonelli

Queridos lectores,

Probablemente no hay hueco más grande que llenar que el del piloto de Fórmula 1 más exitoso de todos los tiempos. Lewis Hamilton es sencillamente insustituible, al menos como personalidad y marca. Pero es precisamente esta tarea la que se le ha encomendado a un joven de 18 años que ni siquiera tenía carné de conducir hace un año.

"Cuando James Allison le vio en la fábrica por primera vez, pensó que había un niño corriendo por ahí que había perdido a su padre", bromeó Toto Wolff.

Y fue precisamente ese joven de 18 años quien dio una exhibición de talento por excelencia en Canadá y silenció a todos los críticos que dudaban de la decisión de Mercedes de poner a Antonelli en un puesto de cabeza de inmediato.

Wolff había previsto contratiempos, y los hubo. Estuvo el impetuoso accidente tras unos minutos en los entrenamientos libres de Monza el año pasado, cuando pilotó por primera vez ante el público de la Fórmula 1. O el poco convincente fin de semana en Imola, cuando invitó a sus compañeros de clase y no cumplió.

A veces es un joven normal de 18 años.

La mayor parte del tiempo, sin embargo, es una auténtica muestra de talento que deja destellos de su habilidad y es increíblemente rápido. Canadá fue la prueba perfecta de ello.

Nada más empezar, aprovechó la oportunidad para adelantar al líder del mundial, Oscar Piastri. Y en lugar de centrarse después en sus retrovisores, puso bajo presión al tetracampeón del mundo Max Verstappen.

Y cuando llegó el momento del podio en la fase final, no se dejó amilanar por el hecho de que los dos coches más rápidos de la parrilla por detrás de él estuvieran presionando para arrebatarle de nuevo el primer podio de su carrera en la Fórmula 1.

Al revés, observó cómodamente por el espejo cómo Norris y Piastri se eliminaban mutuamente.

¿El próximo italiano de rojo?

La recompensa fue el tercer puesto y, por tanto, el primer podio de un italiano desde Jarno Trullien Suzuka 2009. Por aquel entonces, Toyota aún corría en Fórmula 1, el regreso de Michael Schumacher aún estaba descartado y Sebastian Vettel, Max Verstappen y Lewis Hamilton contaban con solo mundial entre los tres.

"Obviamente es una gran sensación ser el siguiente italiano en el podio después de tanto tiempo", ríe el piloto de Mercedes. "Este resultado era importante. También lo es para todos los tifosi italianos que hay ahí fuera".

En tiempos en los que los aficionados de Ferrari, una vez más, no tienen muchas razones para sonreír, esto es quizás un pequeño consuelo.

Sin embargo, es poco probable que los aficionados de Ferrari hayan dormido tan bien una vez más, mientras que Antonelli probablemente pasó la noche con una gran sonrisa en la cara - tal vez incluso pensando en si Maranello le llamará en algún momento.

Aunque Antonelli lleva vinculado a Mercedes desde los once años, eso no impidió que su predecesor Lewis Hamilton tomara el camino para vestirse de rojo.

Por cierto, Hamilton también celebró su primer gran éxito en Canadá hace 18 años: su primera victoria en la Fórmula 1.

Antonelli aún está lejos de eso, pero nadie descartaría que no llegara en su primera temporada en la categoría reina.

Así que... ¿llegará la primera victoria de Antonelli en este 2025?

No creo que a Max Verstappen le sorprendiera. Para el holandés, el podio de Antonelli era sólo "cuestión de tiempo" y, de hecho, se veía venir. "Nunca dudé de que su primer podio llegaría este año", alabó el campeón del mundo tras la carrera.

"Lo impresionante es que es rápido por naturaleza. Lo que me gusta es que es sensato y tranquilo. Son grandes cualidades".

¿Y quién no estaría de acuerdo con un tetracampeón del mundo? Los elogios deben caer como el aceite, o como el champán tras la celebración de la victoria.

¿A qué me dedicaba yo cuando tenía 18 años? Dibujaba circuitos de Fórmula 1 en el Paint de Windows con mi mejor amigo e intentaba dar vueltas a la pista lo más rápido posible con el ratón, incluso incluyendo una parada obligatoria en boxes en una vuelta. Si te pasabas del límite de pista, te penalizaban con segundos.

Así recreábamos el campeonato del mundo.

Antonelli acaba de mantener a raya a dos McLaren bajo una enorme presión a 300 km/h y ha recogido los mayores elogios de un tetracampeón del mundo. No está mal para un joven de 18 años con una sonrisa de niño.

Norman Fischer