Un importante paquete de mejoras introducido en las dos últimas carreras ayudó a Lando Norris a realizar una actuación estelar en casa, en el Gran Premio de Gran Bretaña, este fin de semana.

El joven británico se clasificó en la primera fila, liderando brevemente las primeras vueltas antes de terminar segundo (por segunda vez en su trayectoria en Fórmula 1), detrás del ya habitual ganador de la carrera Max Verstappen, siendo Lewis Hamilton quien cerró el podio.

El gran paso adelante del equipo McLaren ha dejado a sus rivales con la esperanza de que ellos también puedan seguir su ejemplo y ofrecer un salto similar en el rendimiento con las mejoras del monoplaza durante la temporada.

Sin embargo, Norris ha pedido cautela a la hora de sacar conclusiones del rendimiento del coche en Silverstone, incluso del hecho de que el monoplaza de Woking parecía ser mucho mejor en carrera de lo que ha sido a principios de la temporada.

Aunque la mejora en la gestión de los neumáticos mostrada en el GP de Gran Bretaña indica un progreso real, el MCL60 sigue estando muy por detrás de sus rivales en áreas críticas.

Preguntado por Motorsport.com sobre la mejora en la degradación de los neumáticos mostrada en Silverstone, Norris dijo: "Definitivamente no ha estado presente en el coche en toda la temporada, y en el Gran Premio de Bahréin fue todo lo contrario".

"Estos circuitos nos permiten cuidar bien los neumáticos. Somos muy, muy competitivos en alta velocidad y estamos casi a la par con lo que el equipo Red Bull podría lograr. Y de hecho, yo diría que en la velocidad media como la curva 15 aquí, Stowe, estamos cerca de ser el mejor coche de la parrilla".

"A muy alta velocidad, como en la curva 9 [Copse], quizás no tanto, pero eso fue en la clasificación y luego, cuando llega la carrera, definitivamente mantenemos nuestro rendimiento cuando otros parecen sufrir un poco".

"Al hacerlo, podemos cuidar los neumáticos bastante bien, especialmente cuando no hay degradación térmica en la rueda, como ha ocurrido aquí".

Reflexionando sobre las fortalezas y debilidades del paquete del MCL60, Norris dijo que seguían teniendo un problema importante en las curvas lentas, que es donde Hamilton fue capaz de ponerle bajo cierta presión en su batalla.

"Tenemos un coche pobre, y cuando digo pobre, diría bastante terrible, en las curvas de baja velocidad", explicó Norris. "Es extremadamente difícil de conducir".

"Siento que [la gente] se emociona y lo acepto, pero vamos a ir a un par de circuitos próximamente en los que estoy seguro de que la gente va a decir: '¿Qué ha pasado ahora? ¿Cómo ha ido tan mal de repente?'".

"Hemos mejorado muchas cosas, como la degradación de los neumáticos, y siempre hay pequeñas cosas que intentas hacer con la refrigeración de las gomas, pero nada importante por ese lado. Este circuito nos ha permitido cuidar mejor las ruedas y mantenerlas en buenas condiciones. Así de sencillo", añadió el piloto de Bristol..

"Muchas cosas son específicas de cada circuito. No quiero emocionarme demasiado. Se han hecho cosas buenas con las mejoras, pero todavía hay muchas cosas que están lejos de competir en ciertos lugares con un Mercedes, y en el conjunto para poder competir incluso con un Red Bull. Así que queda mucho trabajo por hacer en ambas áreas".

Las claras debilidades en el paquete del McLaren son la razón por la que el jefe del equipo, Andrea Stella, está deseando que lleguen los retos del próximo Gran Premio de Hungría, ya que el estrecho y revirado Hungaroring, que a menudo cuenta con buen tiempo, pondrá de manifiesto perfectamente los problemas.

"En cierto modo, estamos deseando llegar a Hungría para comprobar de forma más exhaustiva dónde estamos realmente", comentó Stella.

"No hay tanta curva de alta velocidad y, si acaso, es una pista dominada por la velocidad media y baja. Además, se pueden dar condiciones de calor lo que, de nuevo, es otro territorio de pruebas para nosotros", finalizó el transalpino.