La demostración de que Russell gana peso en Mercedes

El Gran Premio de Miami 2022 de Fórmula 1 fue toda una montaña rusa para el equipo Mercedes y, en especial, para George Russell, que se colocó en las primeras posiciones durante los entrenamientos libres del viernes, llegando a liderar una de las sesiones, pero que no consiguió pasar a la Q3 el sábado.

El joven piloto británico se quedó a 45 milésimas de Pierre Gasly en la segunda ronda de la clasificación, con lo que tuvo que partir desde la 12ª plaza en el nuevo y tan criticado circuito estadounidense.

Cuando se apagaron los semáforos en la salida, Russell perdió cinco posiciones, por lo que estaba obligado a remontar aún más para seguir con su racha de acabar entre los cinco mejores en cada carrera.

Dicho y hecho para el que quiere hacerse con los galones de las flechas de plata después de superar al siete veces campeón del mundo, Lewis Hamilton, en cuatro de los cincos grandes premios disputados hasta la fecha.

Con gran temple fue superando a todos los rivales que se encontraba en la pista, sin arriesgar demasiado, pero sin ser tímido en las acciones para adelantar, plantándose en la vuelta 40 en la séptima posición con el mismo juego de neumáticos duros. El accidente entre Pierre Gasly y Lando Norris provocó que saliera el coche de seguridad, algo que aprovechó para montar un set nuevo de medios y salir a por todas contra Valtteri Bottas y su compañero de Mercedes.

La última decena de giros estuvo protagonizada por un duelo sin cuartel entre estos tres pilotos, en la que se pudo ver a un Hamilton perdido por la radio al no saber la situación de carrera, mientras que el equipo dejaba "a su elección" parar o no.

En el lado del garaje de Russell se comprobó que, a pesar de su juventud, es alguien preparado y con experiencia, puesto que no habría llegado a estar en la lucha por el quinto lugar de no ser por la sugerencia que hizo a su escudería.

"Diría que nos quedáramos fuera. Solo [entraría] en caso de que salga un coche de seguridad", dijo el inglés por la radio a su ingeniero cuando le preguntaron si hacer una parada o no. "Vamos a ver si hay un Safety Car".

El piloto de 24 años fue llamado a boxes para realizar su cambio de gomas cuando iba quinto, pero decidió quedarse en la pista por si aparecía un coche de seguridad y no perder tiempo, como así sucedió.

"Suenas como un genio cuando suceden cosas así, pero es algo cuando estás en una estrategia así, creo que fuimos afortunados", indicó tras la carrera en Miami. "Teníamos cubierta la séptima posición, no tenía sentido entrar en boxes, lo mejor era quedarse fuera y esperar a algo así, hemos tenido un poco de suerte", sentenció el de Mercedes.