Las seis coronas de Ogier que le acercan a Loeb en el WRC

Que Sebastien Ogier es leyenda de los rallies es una obviedad como otra cualquiera. El piloto de la alpina Gap (Francia) atesora ya seis Mundiales a sus espaldas, tras el conseguido el pasado fin de semana en la tierra australiana. Solo tres le separan del rey de reyes: Sebastien Loeb.

Si seguirá por la senda o no del alsaciano es algo que no comenzaremos a dirimir hasta que el Montecarlo del próximo enero dé comienzo y el francés se ponga a los mandos del Citroen C3 WRC, en su segunda etapa con la marca gala.

Ogier debutó en el Mundial Junior (JWRC) en 2008, a bordo de un Citroen C2 S1600, antes de probar el C4 WRC en el Gales de aquel año. El francés y su inseparable Julien Ingrassia se hicieron con la corona junior y se aseguraron un hueco en el equipo Junior oficial del doble chevrón en el WRC 2009.

La crónica:

Sexto título de Ogier y victoria para Latvala en Australia

Hasta que a finales de 2011 rompió relaciones con Citroen, tras el acalorado duelo con Loeb en el seno de la marca francesa, Ogier parecía el claro sustituto de la leyenda. Se buscó la vida en Skoda primero, para desembarcar en Volkswagen en 2013 e iniciar una racha ganadora que se prolonga hasta nuestros días.

Los dos últimos años con M-Sport solo han terminado por consolidar su imagen de imbatible en la nueva era del WRC. Ni Hyundai con Neuville, ni Toyota con Tanak han logrado derrocarle. Acumula ya 136 rallies del Mundial, 44 victorias, 71 podios y 539 tramos ganados. Y en 2018 regresa a donde todo empezó para terminar su carrera deportiva en los rallies... ¿igualando a la leyenda del WRC?