Por qué lo de Pepe Martí a la Fórmula E es lo contrario a un paso atrás

Ya es oficial el paso de Pepe Martí  a la Fórmula E. El aún piloto de Campos Racing en Fórmula 2 disputará la temporada 2025/2026 del campeonato eléctrico, y no han faltado los puristas que han cuestionado ese movimiento, viendo como un paso atrás algo que de hecho puede suponer uno adelante.

"La misma hambre, un nuevo escenario", dice el propio piloto el anuncio de su fichaje por Cupra Kiro Race, y este artículo no va tanto de defender las bondades, que las hay, de la Fórmula E como los aspectos positivos, que los hay, de esa decisión.

Pepe Martí cambia una categoría de apoyo, la Fórmula 2, por un campeonato del mundo, un mundial de la FIA, y ese podría ser argumento suficiente para apoyarle en este nuevo capítulo de su carrera deportiva. Hay quien responderá que la F2 es la antesala del mundial más grande, el de Fórmula 1, que es el sueño de prácticamente todo piloto. Pero ahí está el punto: apoyado por Red Bull Racing, esa puerta parece cerrada para Martí, al menos a corto plazo.

No solo Red Bull no le ha dado ni un test de F1 este año (con monoplazas de otras temporadas, no necesariamente una FP1), sino que el asiento que tendrá disponible en su equipo B, Racing Bulls, está ya asignado a un piloto que va detrás de Martí en la F2, Arvid Lindblad. Y para el otro, aún guardan posibilidades dos 'juguetes rotos' del sistema: Yuki Tsunoda y Liam Lawson.

Pero es que incluso si ninguno de los dos continuara, Marko y los de las bebidas energéticas parecerían capaces de alinear a Ayumu Iwasa, segundo clasificado en su destierro en la Super Fórmula de Japón y que de hecho hará la FP1 de este fin de semana en México con Racing Bulls. A Iwasa, por cierto, no olvidemos que Marko le puso como deberes, además de resultados, aumentar su base de fans en redes sociales. Surrealista. 

Ese podía ser el destino de Martí en un par de años, probablemente después de disputar la temporada 2026 con Campos Racing. Y por cierto, se estima que el presupuesto que se gasta un piloto por año en la F2 es entre dos y tres millones, paga tú eso sin garantías de, tres temporadas después, poder avanzar.

Y sí, de la Super Formula también se sale, que se lo pregunten al tetracampeón de la IndyCar Alex Palou, pero habrá pocas dudas de que es más fructífero estar en la Fórmula E.

Es un campeonato mundial que cada año va a más, que sigue aumentando sus números en cuanto a repercusión y que tiene, más que la mayoría de disciplinas, seis fabricantes de coches participando. Supone, por tanto, un escaparate magnífico, que ha servido a otros muchos para, con esas marcas, debutar en otro mundial muy apetecible, el de resistencia, el WEC.

Desde que la Fórmula E es mundial, en 2021, el primer campeón fue Nyck de Vries, que llamó la atención de la Fórmula 1 con un gran rendimiento y pasó al 'Gran Circo', algo a lo que puede aspirar Pepe Martí incluso si la F1 no es el fin del mundo en las carreras. Sí, lo de De Vries en la categoría reina fue de aquella manera, pero... ¿en qué estructura estaba? Pues eso.

Pepe Martí además puede ser en cierto modo un pionero de un campeonato al alza, porque aunque en la primera temporada estuvieron Jaime Alguersuari, Oriol Servià y Antonio García y luego hace dos años unas pocas carreras de Roberto Merhi, será el primer piloto español a tiempo completo en Fórmula E desde aquel inicio.

Dale una oportunidad, la Fórmula E tiene muchos ingredientes que la convierten en apasionante, y un formato que en muchos aspectos es único. Pepe Martí puede ayudar a incrementar el alcance de la Fórmula E (fundada por españoles) en un año más nuestro que nunca: marcado en rojo está el ePrix de Madrid que se disputará en marzo en el Jarama, y para el que ya hay apuntadas miles de personas en espera para la venta de entradas que sale este viernes.

Ya lo dijo a Motorsport.com uno de los cofundadores, Alberto Longo: sería un sueño hecho realidad tener un héore nacional en el primer ePrix (fuera de aquel Plan B ante la pandemia en Cheste) en España.

Y si con la Fórmula E lo intentas y no te gusta, está bien, pero no te hagas líos, lo de Pepe Martí no es un paso atrás. Está lejos de serlo.