Sainz rebaja expectativas para Singapur y habla de uno de sus "momentos más duros"

Carlos Sainz llega al Gran Premio de Singapur con máxima motivación después de su inesperado podio en el Gran Premio de Azerbaiyán, un subidón de moral tanto en lo personal como en lo colectivo como equipo, que además confirmó que las buenas sensaciones del madrileño simplemente se estaban frenando por problemas de fiabilidad y errores mayormente fuera de su control.

Sin embargo, el piloto de Williams ha llegado a Marina Bay con la cabeza reseteada y con los pies en el suelo, consciente de que el podio de Bakú probablemente no vuelva a repetirse al menos este año.

De cara a Singapur, Sainz no cree que Williams vaya a ser demasiado competitivo debido a la configuración de la pista y de su coche.

"Creo que, siendo realistas, cada vez que ponemos un alerón con mayor carga aerodinámica en nuestro coche parecemos ser un poco menos competitivos. Creo que todos nuestros grandes resultados han sido con alerones traseros de baja carga aerodinámica, en circuitos de poca carga, donde nuestro monoplaza tiende a responder mejor".

No obstante, el piloto español asegura que seguirá dando el 100% de sí mismo como hizo en Bakú: "Eso no significa que aquí no vaya a intentar rendir y hacer un fin de semana como el que hice en Bakú".

Y añadió: "Creo que esa tiene que ser mi intención de aquí a final de año. Bakú ha sido sin duda una gran inyección de motivación e incluso diría que un alivio, porque ha confirmado lo que he estado diciendo todo el año, que la velocidad no es un problema y que sólo tenía que hacer fines de semana limpios, y espero que sirva de ejemplo y ahora pueda seguirlo hasta final de año".

Sainz también aprovechó la ocasión para hablar de lo complicada que había sido la temporada 2025 de la Fórmula 1 hasta el podio de Azerbaiyán, sobre todo en Países Bajos e Italia tras el parón de verano.

"Sin duda fue muy duro. Probablemente uno de los momentos psicológicamente más duros de mi carrera por la cantidad de contratiempos que tuve que afrontar a lo largo del año. Para mí fue especialmente duro después de las vacaciones de verano, porque volví con mucha energía, lleno de motivación, renovado, con una mentalidad y un enfoque nuevo".

"Hice dos grandes clasificaciones en Zandvoort y Monza. Seguí rodando en buenas posiciones tanto en Zandvoort como en Monza y en ambas ocasiones de forma consecutiva sucedió lo mismo que en la primera mitad de la temporada".

"Así que me dije, vale, he cambiado mi enfoque, estoy lleno de energía y ahora dos reveses consecutivos para hundirme de nuevo. Así que no fue nada fácil y sí, fue muy frustrante. Creo que empezabais a ver también en mí lo frustrado que empezaba a estar".

"Pero mantuve el pie en el acelerador y al final el resultado mereció la pena y creo que en ese sentido estoy contento y orgulloso de la resistencia, porque volver de las vacaciones de verano con energía renovada y recibir dos fuertes golpes y tener que hacerlo todo de nuevo fue duro", explicó.

Carlos Sainz, Williams FW47

Foto de: Clive Mason/Getty Images