La de Hamilton en Estiria, la pole más aplastante en seis años

Si bien la diferencia de 1,216 segundos de Lewis Hamilton sobre Max Verstappen el sábado pudo ser menor, de no haber hecho un trompo el holandés en su última vuelta rápida, el piloto de Red Bull admitió que no tenía mucho más para superar al campeón del mundo.

De hecho, sumando los mejores parciales en Q3 de ambos, los que sí juntó Hamilton en su vuelta final, la diferencia pudo estar sobre las siete o seis décimas de segundo. Al final fue casi el doble.

Descúbrelo:

Plan Renove Peugeot

La última vez que vimos tal diferencia, fue en el GP de Italia 2017, también con lluvia durante la clasificación. Allí Hamilton, igual que esta vez, pasó por meta después de sus rivales y le endosó 1,148 segundos de diferencia a Verstappen. El holandés recibiría después una penalización de 20 lugares en parrilla por cambios en la unidad de potencia fuera de los límites que establecía el reglamento en esa temporada.

Esto sin embargo, se ve superado por la clasificación del GP de Gran Bretaña de 2014, también con condiciones cambiantes, en las que Nico Rosberg superó a Hamilton después de que el británico errara en su vuelta clave, abortándola.

La diferencia fue de 1,620 segundos, no sobre Hamilton, sino sobre Sebastian Vettel, la más amplia desde que inició la era de dominio de Mercedes con la normativa V6 turbo híbrida.

Según las estadísticas, en esta era turbo híbrida, es decir, desde 2014, se han disputado 11 poles con lluvia, todas acaparadas por pilotos de Mercedes.

Con la del sábado, Hamilton ha sumado la séptima en ese periodo y con condiciones cambiantes, perdiendo solo con Rosberg en Gran Bretaña y Bélgica 2014, en Austin en 2015 cuando se llegó a disputar solo hasta Q2, y luego en Hungría 2016.

En lluvia, debido a las condiciones cambiantes vuelta a vuelta, el tener el timing correcto y la posición ideal en pista para completar una vuelta limpia y sin distracciones, puede resultar clave para marcar la diferencia.

En esto, Hamilton por lo general ha acertado en los últimos cuatro años, como se vio el sábado en Estiria, cuando fue el último en pasar meta entre quienes peleaban la pole, aprovechando hasta la más mínima mejora en las condiciones climatológicas.