Desde la pole position, Verstappen pudo construir una cómoda ventaja sobre el segundo clasificado, Fernando Alonso, pero con la llegada de la lluvia el piloto de Aston Martin disfrutó de una ventaja estratégica al comenzar con el neumático duro, mientras el holandés sufría con unos medios ya bastante desgastados.

Cuando la lluvia llegó y se intensificó, Red Bull llamó a Verstappen para entrar en boxes en la vuelta 56 de 78 y montar los intermedios, pero el piloto asturiano había entrado un giro antes, pero para sorpresa de todos, puso medios nuevos que inmediatamente después tuvo que cambiar para ir también en dirección a los intermedios.

Según Horner, la parada en boxes de Verstappen llegó una vuelta más tarde de lo ideal, pero la apuesta de Alonso alivió la presión sobre el holandés, que sobrevivió a un susto en Portier.

"Creo que estábamos contra las cuerdas", dijo Horner a Sky F1.

"Sabíamos que este fin de semana iba a ser nuestro mayor desafío en la primera mitad del año y el hecho de estar en una pista con muchas curvas de baja velocidad jugaba a su favor. Pensábamos que Ferrari podría ser el principal rival, pero Fernando estuvo ahí todo el finde. Increíble".

"Estábamos nerviosos desde el momento en que se encendió el semáforo, porque cuando quitaron las mantas, vimos que bastantes de ellos iban con el neumático duro y que había posibilidades de lluvia, si podían alargar sus paradas y nuestros neumáticos medios se degradaban...".

"Sentí que quizás deberíamos haber tomado la decisión una vuelta antes de poner los intermedios. Creo que si Fernando hubiera elegido los intermedios, habría estado mucho más ajustado y habría puesto mucha más presión en nuestra parada en boxes".

"Pero, por suerte, escogió un neumático de seco justo cuando estaba empezando a llover más. En ese momento, es como: 'Max no te arriesgues, sólo trae el coche hasta boxes'".

Christian Horner también alabó el entendimiento mutuo que tienen Verstappen y su ingeniero de carrera de toda la vida, Gianpiero Lambiase, que a la postre fue clara para confirmar el triunfo.

"Hay mucha confianza entre los dos y esa relación entre ingeniero y piloto es única", explicó.

"Tiene que haber un vínculo entre los dos que les permita hablar abiertamente. Tú gestionas las emociones del piloto, le das la información, por lo que tiene que haber esa confianza entre ellos, algo que ves una y otra vez con ambos".

"Cuando eres el coche líder, siempre digo que sólo puedes perder, no tienes nada que ganar. Y sólo tienes que intentar trabajar con las condiciones que hay en cada momento", concluyó el de Red Bull en la Fórmula 1.

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