Mientras todo el mundo mira con interés el momento en el que Pecco Bagnaia reaccione y le de la vuelta a la situación, Jorge Martín sigue haciendo su camino, y si hace dos fines de semana, en Japón, tenía al italiano a solo 10 puntos con cuatro grandes premios por delante, ahora lo tiene a 17 con solo las citas de Malasia y Valencia por jugarse, por más que llegara a Buriram con 20 de ventaja.

Pasan las carreras y se consumen las oportunidades, y el español se mantiene al frente de la general, aunque la respuesta de Bagnaia el domingo, en las complicadísimas condiciones de la pista, fuera sin duda un puñetazo sobre la mesa del bicampeón.

Al final del día, sin embargo, esa exhibición solo rindió 3 puntos de rédito para el italiano, que necesito un error grande del español para doblegarle.

Para Martín, salir 'con vida' de las espinosas condiciones del domingo ya es todo un éxito.

"Fue un día muy complicado, era difícil acabar la carrera, la verdad. El ritmo era alto y las condiciones no eran nada fáciles. Estoy contento porque saqué lo máximo, no fallé y solo perdí una posición con Pecco, que era el objetivo o parte del plan. A partir de aquí, vamos a intentar dar lo máximo en Malasia", donde el Mundial se mueve para competir allí este próximo fin de semana en la penúltima cita de la temporada.

La caída de Marc Márquez permitió a Martín rescatar cuatro puntos muy valiosos para el campeonato, aunque el de Pramac lo ve de otra manera.

"De no haberse caído, creo que Marc hubiera quedado primero, le veía más fuerte, tenía algo más que Pecco. Creo que este fin de semana la (Ducati GP) 23 era inferior a la 24, la verdad. No sé en el balance de toda la vuelta, pero en la recta Marc perdía del orden de una décima y media o dos, creo que sufrió en ese aspecto pero en la carrera (en mojado) creo que era capaz de pasar a Bagnaia, igual en lugar de perder cinco, solo eran cuatro", hizo sus cálculos.

Martín llegó a Tailandia con 20 puntos y sale con 17 de ventaja, solo perdió tres el computo del fin de semana, por lo que llega a Sepang ya con una bola de partido para proclamarse campeón el próximo domingo, para ello tiene que sumar 21 puntos más que Bagnaia. Es el momento de creer.

"Siempre hay que creer, mientras haya posibilidades hay que creer. Siempre he creído, siempre creo en mi, cada vez más, y demostrándome a mí mismo que en días como el domingo, en los que era tan difícil acabar la carrera segundo, estoy preparado ya para ser campeón", dijo.

"Será un reto muy grande ganar a Pecco en Malasia, pero lo intentaré. En Tailandia él se veía muy superior a mi, pero en seco el sábado fui yo más fuerte. En esas condiciones creo que tenemos ahora mismo algo más que él. Está claro que Bagnaia va a ser muy rápido en Sepang, pero creo que yo también puedo serlo", dijo convencido.

Antes del arranque del GP de Malasia, Martín tiene cuatro días por delante que se le van a hacer un poco largos, aunque este año el español está manejando mucho mejor este tipo de situaciones de estrés.

"No hay mucho plan, nos vamos a Kuala y tendré un poco de tiempo para trabajar y preparar el gran premio. La de Tailandia fue una de las carreras que mejor me he preparado, no solo el físico, como siempre, sino estudiar los detalles y estar en todo. Lo intentaré de nuevo", dijo.

Durante la rueda de prensa del domingo posterior a la carrera, Bagnaia dijo haber encontrado un gran cambio que le ayudó. "Tengo ganas de ver ese gran cambio, está claro que encontró algo para ser más rápido que nosotros, y también lo que dijo de la sprint", apuntó a las palabras de Bagnaia, activando claramente la guerra psicológica contra el español.

"Sí, obviamente es tema psicológico. Creo que los dos estamos muy fuertes, los dos estamos un paso por delante y con opciones de ganar todos los fines de semana. En Tailandia ni él ni yo teníamos mucho más que el otro, era un tema más de ganas y de hambre y, ahora mismo creo que en eso no me gana".

El jueves, Martín admitió que se había preparado a fondo la carrera de Buriram, una preparación que dio frutos.

"Se vio el sábado en seco, pasé de estar a 1.6 segundos de Pecco a pasarle, en esas mismas condiciones creo que tenia un puntito más que ellos y hubiera podido pelear por la victoria, pero en mojado intenté lo máximo pero no pudo ser", admitió sus dudas en condiciones de agua.

"Seguiré preparándome a conciencia, estas tres próximas semanas son, seguramente, las más importantes de mi vida, así que hay que darlo todo. Si no sale como quiero tampoco me voy a morir, ya me pasó el año pasado, pero está claro que lo voy a luchar con todo lo que tengo para conseguirlo", dijo un Martín al que le gusta estudiar la carreras en vídeo durante horas.

"Toda mi vida son vídeos, meterle horas, trabajar la cabeza y el físico, es mi estilo de vida, no me cuesta, es algo que me pide el cuerpo ya acostumbrado. Ya esta tarde (del domingo) empezaré a ver vídeos de carreras en Malasia, es la selección natural, llegan los que están preparados y los que mas se lo curran".

Pese a la tensión de la carrera, Martín no pierde el buen humor y cuando le preguntaron qué vídeos mira, si los suyos (desde su cámara onboard) o también el de los demás.

"Miro x vídeos", dijo antes de darse cuenta de que se podía entender mal provocando la risa general. "Me refiero a x número de vídeos, parece que conocéis bien la página", bromeó. "No conozco esas páginas", siguió con la broma.

El sábado fue Enea Bastianini el que ganó la sprint y el domingo Márquez el que estuvo luchando por la victoria hasta la caída, dos pilotos que están en plena forma y que estarán ahí en medio de la pelea. "Me da igual quién esté ahí, yo solo me centro en mí mismo, no miro lo que hacen los otros, hago lo máximo y el domingo creo que hice una gran carrera, di lo máximo. Es más, creo que aunque no me hubiera ido largo (cuando le adelantó Bagnaia y Martín) hubiera acabado igualmente segundo porque no tenia ese extra, el ritmo que tenía Pecco, que me ha sacado segundos", dijo.

Sobre el neumático defectuoso que le tocó el año pasado en Qatar, en la penúltima carrera del año, Martín ofreció un discurso muy pausado.

"Lo que pasó el año pasado con Michelin no fue algo que estuviera en sus manos, fue algo que pasó, coincidencia, azar, casualidad, me pasó a mi, otras veces le ha pasado a Pecco, que te toque en carrera es muy mala suerte, pasó, pero no lo pienso. Es algo que yo no puedo controlar y si vuelve a pasar iré al máximo con lo que tenga hasta donde llegue".

Faltan ya solo dos carreras para la resolución del Mundial y, hasta hoy, Ducati ha cumplido con su promesa de ofrecer a todos sus pilotos el máximo apoyo y libertad para luchar.

"Ducati impecable, jamás he tenido dudas. Este año ya lo han ganado todo, el sábado las ocho primeras motos en la meta eran suyas, ya llevan dos con Pecco, espero que este año me lo dejen ganar a mi", dijo entre risas, un Martín que, si gana el título, podría llevar el año que viene el número 1 en la cúpula de la Aprilia oficial de fábrica: "Veremos si lo consigo, y si lo consigo, veremos", zanjó el líder del Mundial.