Telemetría F1: Mercedes destaca con Red Bull y Ferrari en problemas

La de Las Vegas prometía ser una pista atípica que podría barajar algo las cartas y, en este sentido, la primera jornada de entrenamientos libres dio inmediatamente mucho que pensar.

Como era de esperar, los bajos niveles de agarre y las temperaturas extremadamente bajas, que en la FP2 llegaron a ser de 13° sobre el asfalto, tuvieron un impacto bastante importante tanto en el rendimiento de los coches a una vuelta como en la gestión de los neumáticos en tanda larga.

La cuestión de los neumáticos es, sin duda, la que suscitará más atención a lo largo del fin de semana, porque más que una cuestión de las características del coche, parece ser más una cuestión de cómo utilizan los neumáticos y cuánto agarre son capaces de generar cada equipo.

Junto a la evolución de la pista estuvo también el programa paralelo llevado a cabo por los equipos, ya que algunas escuderías, como Red Bull y Ferrari, optaron por ir cada vez más descargados desde la FP1 hasta la FP2, adaptándose también a las referencias de sus rivales. Otros, como McLaren, también dividieron sus opciones, con Lando Norris montando el alerón delantero más cargado y Oscar Piastri usando el más descargado.

Mercedes lidera el viernes con McLaren por detrás

No es nada nuevo que el equipo alemán a menudo destaque los viernes, antes de caer el sábado. Aunque George Russell es consciente de que ese escenario podría repetirse en Las Vegas, tanto él como Lewis Hamilton hicieron alarde de confianza.

Su sensación es que el W15 es potencialmente competitivo y que, al menos en las condiciones que han caracterizado a la jornada del viernes, el coche ha funcionado bien. Las elecciones del equipo dieron sus frutos especialmente en las secciones lentas, como en la secuencia 7,8 y 9, donde puede ser muy incisivo en la entrada, o en la chicane final.

El punto crucial es que aquí, más allá de las características y puntos fuertes del coche, lo que realmente marca la diferencia es la capacidad de poner los neumáticos en una ventana óptima. En varias ocasiones a lo largo de este mundial, el coche de Brackley ha demostrado que le gustan más las temperaturas frescas que las cálidas, en las que pierde agarre rápidamente.

En Las Vegas los pilotos se encontraron con un coche en parte difícil de conducir por la falta de agarre, pero en general menos nervioso que otros monoplazas, un aspecto que había penalizado a Russell y a Hamilton anteriormente.

Comparación telemétrica Norris-Hamilton FP2 Las Vegas

Foto de: Gianluca D'Alessandro

Por otro lado, le falta algo en términos de velocidad punta, donde los otros equipos tienen algo más, con la excepción de Red Bull, que pierde seis décimas y tiene problemas por no tener un paquete de baja carga. A modo de comparación, la diferencia con el McLaren de Norris es 3-4 km/h más rápido en la primera trampilla de velocidad, casi en línea con Ferrari si se toma como referencia una vuelta en la que ni Carlos Sainz ni Charles Leclerc aprovecharon los rebufos. Sin embargo, la diferencia es incluso mayor en otros puntos de la pista, como antes de la frenada de la curva 4, llegando hasta los 9 km/h respecto al MCL38.

Hablando precisamente de McLaren, la sensación, confirmada por los pilotos, es que tiene un coche que efectivamente es competitivo a una vuelta, tanto porque consigue llevar los neumáticos a una buena ventana, como porque su velocidad en recta es muy buena.

En general, el McLaren no parecía un McLaren, porque perdía tiempo en puntos concretos, como la curva 1, o en la secuencia 7, 8 y 9, donde Norris no parecía tan agresivo en la entrada como los dos pilotos de Mercedes. Lo que preocupa más al equipo de Woking es el graining evidente en las tandas largas: aunque en realidad es un fenómeno que ha afectado más o menos a todos los equipos.

Lando Norris, McLaren MCL38

Foto de: Glenn Dunbar / Motorsport Images

Ferrari busca una respuesta su ritmo con los blandos

Como suele ocurrir, las temperaturas en Las Vegas son un tema a debate. En realidad, el trazado se adapta bien a las características del SF-24, con muchas rectas y varias curvas lentas en las que no es necesario hacer rodar el coche durante mucho tiempo y poner a prueba el tren delantero, pero como se había especulado, poner los neumáticos en la ventana óptima parece ser bastante complejo.

Es un tema que Ferrari ya ha sufrido en otras ocasiones durante la temporada, especialmente al intentar extraer algo extra del neumático blando en el momento decisivo de la clasificación. Aquí, Ferrari parecía tener más problemas con el compuesto más blando que con el medio y no debería sorprender que, como resultado, los de Maranello intentaran algo diferente en términos de puesta a punto.

Está claro que en un circuito tan hostil como Las Vegas, porque incluso en las curvas se suele rodar con muy poca carga aerodinámica, lo que dificulta la conducción del coche, cuando hay falta agarre en general, es difícil extraer el tiempo y se trata de hacer una vuelta realmente limpia, sin fallos.

Charles Leclerc y Carlos Sainz son muy conscientes de ello, de hecho el monegasco abortó su vuelta en varias ocasiones para aprovechar mejor el blando, mientras que Sainz fue incapaz de acabar una vuelta totalmente limpia.

Comparación telemétrica Sainz-Hamilton FP2 Las Vegas

Foto de: Gianluca D'Alessandro

La propia curva 1 es uno de los puntos en los que todavía tienen que trabajar un poco, porque es una de esas secciones en las que realmente podría tener problemas el SF-24, ya que hay que tener una buena rotación en medio de la curva y no perder la trasera en la salida.

Sainz intentó entrar con mucha velocidad, pero fue incapaz de mantener el mismo ritmo en la siguiente sección y perdió varias décimas tanto en comparación con el Mercedes como con el McLaren.

En general, el SF-24, al menos a una vuelta, es rápido, gracias también a su alerón más descargado en la FP2, pero necesita encontrar más algo en la búsqueda de agarre para encontrar el ritmo en las curvas y en las frenadas, especialmente con el blando.

Esa es otra de las razones por las que los pilotos se mostraron más optimistas con el ritmo de carrera, donde también parecen sufrir algo con el graining y la degradación, pero con mejores sensaciones.