Norris experimenta con su estilo para adaptarse al nuevo coche
Lando Norris dice haber experimentado con su estilo de conducción debido a la nueva normativa de la Fórmula 1 para la temporada 2022 y cree que podría necesitar adaptarse al MCL36.
La Fórmula 1 ha introducido su mayor cambio en el reglamento desde 2009, con coches que presentan una aerodinámica completamente renovada y diseñada en torno al efecto suelo.
Aunque la pretemporada ha comenzado de forma oficial en Barcelona el miércoles 23 de febrero, los pilotos ya han probado sus nuevos monoplazas en el mundo virtual, gracias a las horas que han pasado en los simuladores.
Lando Norris dice haber aprovechado su tiempo para experimentar con cambios en su estilo de pilotaje, para así adaptarlo al MCL36 que usará esta temporada, en caso de que este nuevo coche necesite un enfoque diferente para sacarle el máximo partido.
"Claro que lo tengo presente", dijo el piloto cuando le preguntaron si está teniendo en cuenta los posibles cambios que tenga que realizar en su estilo para adaptarlo a los monoplazas con las especificaciones requeridas para 2022.
"He pasado mucho tiempo en el simulador, no solo conduciendo el coche, sino también preparándome para llevarlo de formas diferentes y estar preparado para usar distintos estilos de conducción debido a esto" comentó Norris sobre su proceso.
"Diría que nuestro coche ha sido bastante específico en los últimos años en cuanto a cómo pilotarlo y a cómo sacar todo su rendimiento. Esto se demostró con la llegada de Daniel [Ricciardo]. Creo que es más sencillo adaptarse a unos monoplazas que a otros".

En su primer año dentro del equipo de Woking, Ricciardo tuvo muchos problemas para adaptarse al MCL35M, predecesor del coche de esta temporada, pero el cambio en la normativa para 2022 pone a ambos pilotos en la misma línea de salida.
Norris es consciente de que todos en la parrilla podrían acabar en la misma situación que sufrió Ricciardo el año pasado, aunque el británico confía en su habilidad para acostumbrarse rápidamente a las nuevas máquinas.
"Creo que es para todos igual, es posible que los nuevos coches se adapten mejor al estilo de conducción de unos que al de otros y podría ser complicado para mí", reconoció Norris. "Pero así es la vida, ¿no? Tienes que lidiar con ello".
"Antes de llegar a la F1, tuve que enfrentarme a eso en cada una de las categorías en las que competí, y cada año tuve que adaptar algo nuevo para intentar sacarle el máximo partido".
"Está demostrado por los campeones y los ganadores de carreras que un coche de Fórmula 1 no es algo sencillo de entender, o de mentalizarte para ello. Creo que el año pasado lo hice más y es con lo que Daniel tuvo problemas".
"Espero que el coche encaje bien con mi estilo de pilotaje y todo vaya genial, pero sin duda habrá cosas a las que tendré que adaptarme".
"Pero este [coche] es muy diferente y todo va a ser distinto para mí y para Daniel".
Por el momento, parece que el trabajo invernal de Norris está dando sus frutos. Fue el primer piloto en salir a pista en Barcelona y logró colocarse en segunda posición tras la sesión matutina, que lideró Charles Leclerc con su F1-75. El piloto británico, no obstante, protagonizó una bandera amarilla al quedarse parado al final del pitlane en la tarde de Barcelona.
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