La FIA sanciona a tres pilotos tras la carrera de Austria

En la última vuelta de la carrera del Red Bull Ring, un accidente entre Kimi Raikkonen y Sebastian Vettel en la curva 5 provocó que los comisarios mostraran dobles banderas amarillas.

Varios pilotos fueron llamados a declarar ante comisarios después de la carrera por pasar demasiado rápido por el lugar del accidente y no reducir lo suficiente la velocidad.

Los que acabaron en la zona de puntos, Carlos Sainz, Sergio Pérez, Charles Leclerc, Daniel Ricciardo y Pierre Gasly , fueron investigados, al igual que Antonio Giovinazzi, Nicholas Latifi y Nikita Mazepin.

Después de reunirse con todos, los comisarios anunciaron que tanto Latifi como Mazepin habían sido sancionados con 10 segundos de stop and go, que se convirtieron en 30 segundos de penalización en la clasificación final.

Los seis pilotos restantes fueron absueltos de cualquier infracción después de que los comisarios consideraran que habían tomado las medidas oportunas.

(Mira cómo fue el intercambio de posiciones de la carrera de Austria antes de seguir)

Mazepin y Latifi también recibieron tres puntos de penalización en su superlicencia de la FIA, con lo que Latifi llegó a seis en el periodo de 12 meses, y Mazepin a cinco.

Raikkonen fue sancionado después de la carrera por causar el accidente con Sebastian Vettel que provocó la doble bandera amarilla en la última vuelta de la carrera.

Los comisarios consideraron que Raikkonen "cerró la puerta" a Vettel, provocando una colisión y sacando a ambos coches de la pista.

Raikkonen recibió un drive-through que se convirtió en una penalización de 20 segundos, pero el piloto de Alfa Romeo de hecho asciende a la 15ª posición en la clasificación final, ya que Latifi -que terminó 1,5 segundos por delante- recibió una penalización mayor.

Raikkonen también recibió dos puntos de penalización en su superlicencia de la FIA, lo que le lleva a seis en los últimos 12 meses.

George Russell fue convocado por moverse en frenada mientras defendía el 11º puesto ante Raikkonen al final de la carrera, pero los comisarios se mostraron "satisfechos de que el movimiento no fuera peligroso o errático", y por lo tanto no tomaron ninguna medida.