Márquez y su retorno: "Cuando me retire, sabré que intentarlo más fue imposible"
A unos días de poder conseguir su noveno título mundial, Marc Márquez reflexiona sobre lo que ha vivido en los últimos años, conociendo el infierno y volviendo a lo más alto.
Marc Márquez, Ducati Team
Foto de: Ducati Corse
Marc Márquez está a unos días de un momento que puede ser histórico en su carrera deportiva. Tras un 2025 absolutamente dominante, con 14 victorias al sprint y 16 en carrera larga en 16 grandes premios, el español tiene una ventaja descomunal en lo más alto del Mundial de Pilotos de MotoGP, esto es, de 182 puntos sobre su hermano, Alex Márquez.
Eso quiere decir que en el Gran Premio de Japón del próximo fin de semana, en Motegi, el de Cervera podrá alcanzar ya su noveno título mundial de motociclismo, el séptimo en la categoría reina, si consigue tres puntos más de margen sobre el #73. Una locura si tenemos en cuenta que aún quedan cinco rondas para el final de la presente campaña.
Y es que Márquez ha mostrado en este 2025 el nivel que venía enseñando hasta 2019, curso en el que también arrasó y que precedió a su descenso a los infiernos, con una lesión en el brazo que le torturaría durante bastantes meses. Pero Marc también tuvo que enfrentarse a una Honda deficiente, lo que le llevó a salir de su fábrica de toda la vida para poner rumbo a Gresini Racing, donde un gran 2024 le abrió las puertas del equipo oficial de Ducati.
Este proceso ya ha sido nombrado por muchos, incluso por pilotos de MotoGP, como el mayor retorno de la historia del campeonato, y uno de los mayores 'comeback' de toda la historia del deporte. Y ha sido el propio Márquez el que ha reflexionado sobre ello, en una entrevista realizada por la web oficial de MotoGP en Misano que ha sido publicada este viernes, en las redes sociales del campeonato.
"Hace dos años, no podía imaginar que estaría en este estado de forma. Estoy aquí porque estoy disfrutando. La manera en la que disfruto es ganando, y ahora estamos ganando mucho. Por esa razón, me siento relajado, con mucha confianza, pero sé, porque he tenido esa experiencia, que de un día para otro, puede cambiar todo", empieza reflexionando el catalán, antes de recordar su lesión en Jerez, en 2020.
"Venía de cuatro títulos mundiales consecutivos, y te sientes imbatible. Sientes que no puede pasarte nada". Pero le pasó, y las prisas por querer volver antes de tiempo tras aquella dura caída en la pista andaluza, en la cita que abría la temporada del COVID-19, le pasaron factura. "Mi gran error fue intentar volver demasiado pronto. ¿Pero por qué lo hice? Con ese extra de confianza que tenía en ese momento, sentía que no podía pasar nada".
Márquez comentó que el momento más duro, sin embargo, no fue quedarse en casa, sino ver que algo no iba bien cuando intentó volver, en 2021: "Estaba en casa, con la lesión, intentando recuperarme... Eso fue duro, pero el momento más duro llegó cuando intenté volver, en 2021. Empecé a pilotar de nuevo, y no me sentía bien. Mi cuerpo estaba extraño, no pilotaba bien. Sentía mi brazo de una manera extraña. Entonces, nos dimos cuenta de que había una rotación en mi brazo, porque yo insistí y dije, 'aquí hay algo, siento mi brazo en una posición, y luego es otra distinta'. La sensación era de mucho dolor todo el día, y ese fue el momento más duro; era como si no hubiera motivación para continuar".
Tal fue su crisis que el ilerdense incluso pensó en la retirada, pero optó por seguir adelante, con un plan maestro y muy bien pensado: "Estaba cerca, e incluso fue la pregunta: ¿por qué no nos paramos y ya está? Pero entonces, tuve algo dentro y dije, ¿por qué? ¿Por qué tengo que parar? Quería probarme a mí mismo, responder a la pregunta de si era competitivo, y para responder a esa pregunta estaba tratando de encontrar la mejor moto en la parrilla, que era una Ducati. Ese era mi objetivo. Simplemente, me olvidé de las relaciones, del dinero, de la historia, y dije, 'está bien. Solo quiero responder a esa pregunta'".
"Tuve buenos comentarios de mi hermano, eso ayudó, Alex me ayudó mucho a tomar la decisión. Era solo para un año, para ver si era competitivo. Si ese año no lo era, estaba seguro de que mi carrera terminaría Dejar Honda y correr gratis para un muy buen equipo como era Gresini, pero corriendo gratis, era sólo para demostrarme a mí mismo que era capaz de ser competitivo. Fue un reto muy grande, arriesgué muchas cosas", siguió.
Pero, por más que tuviera una estrategia en la cabeza, lo logrado este año, según él, ha superado sus expectativas: "Reconstruí mi confianza, y volver a ganar fue algo especial. Pero en cuanto pasé al equipo de fábrica de Ducati, sabía que estaba en el lugar perfecto para luchar por el campeonato. Estaba preparando mi pretemporada con un objetivo, que era intentar luchar por el campeonato. Pero por supuesto, la forma en que lo estamos haciendo es algo que nadie puede predecir. Ganar tantas carreras, en circuitos en que normalmente sufría, es algo inusual y difícil de repetir".
Marc Márquez, Ducati Team
Foto de: Ducati Corse
Así, Márquez tiene claro que no ha podido intentar más volver a la cumbre: "Si lo intentas, no significa que lo lograrás, pero ya es un éxito. Porque si no lo intentas, entonces no sabes [qué pasará]. Cuando me retire algún día, sabré que intentarlo más de lo que lo hice fue imposible".
En clave actualidad, Marc comentó el gran momento que vive junto a su hermano Alex, segundo clasificado del Mundial, que tras su mejor campaña en MotoGP en 2026 podrá disponer de una moto oficial, en el equipo Gresini: "Somos primero y segundo en el campeonato más grande de motociclismo. Es irreal aún hoy. No sé cómo hemos llegado a esa situación, no lo puedo explicar. Cuando tienes la conexión que yo tengo con tu hermano y estás luchando en la pista, puede haber algunas fricciones en la relación, pero en nuestro casos está siendo al revés, estamos más unidos que nunca".
Márquez incluso bromea: "Sin mí ahora él lideraría el campeonato, así que tal vez si volviéramos atrás, él no me daría el consejo de ir a Gresini". De hecho, reveló que fue algo que el propio Alex le dijo en el desayuno del lunes posterior a la primera carrera de esta temporada.
Por último, el #93 también trató la crisis de confianza que está viviendo su compañero de garaje, Pecco Bagnaia: "Yo decía en la presentación del equipo que Pecco era el favorito para el campeonato, porque en los últimos cuatro años fue super competitivo. El problema es que, cuando empiezas a perder confianza, vas más rígido que nunca. Entonces la moto no gira, porque no estás jugando con el cuerpo. Pero yo creo que Pecco va a volver. Tiene el talento, el equipo... Y si queremos lo mejor para el proyecto, necesitamos a los dos pilotos en el top", cerró.
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