Lewis Hamilton es el único piloto con 5,21 millones de seguidores en Instagram. No solo es el más popular de la F1, sino que está entre los deportistas más seguidos en redes sociales, y disfruta compartiendo su día a día con sus seguidores.

El cuatro veces campeón del mundo, no obstante, protagonizó el martes una polémica y fue acusado de comportamiento sexista por los comentarios que hizo al ver a su sobrino de cuatro años vestido con un disfraz de princesa en la noche del 25 de diciembre.

El de Mercedes, en un vídeo de Instagram que ya ha borrado, mostró a su sobrino mientras decía: "Estoy muy triste, mirad a mi sobrino. ¿Por qué lleva este vestido en Navidad? ¿Por qué ha pedido un disfraz de princesa para Navidad?". 

A la pregunta del famoso tío, el pequeño respondió de manera auténtica: "Porque me gustan".

Y Hamilton respondió: "Los hombres no llevan disfraces de princesa".

Desde ese momento, las redes sociales se incendiaron en contra del tetracampeón del mundo de F1, que tuvo que eliminar el momento de su red social.

Por la noche, Hamilton escribió un tuit en el que pedía disculpas por la polémica generada: "Ayer estaba jugando con mi sobrino y me di cuenta de que mis palabras fueron inapropiadas, por lo que eliminé la publicación. No pretendía herir, ni ofender a nadie para nada. Adoro que mi sobrino se sienta libre de expresarse por sí mismo, como todos deberíamos sentirnos".