Las mejoras de Aston funcionan: doble Q3 en Imola; Desastre de Ferrari

El Gran Premio de Emilia-Romagna ha arrancado con un giro inesperado en la clasificación: por primera vez en toda la temporada, Aston Martin ha metido a sus dos coches en la Q3, con Fernando Alonso y Lance Stroll brillando en un sábado de redención tras semanas de oscuridad. Y todo ello mientras el drama se apoderaba de Ferrari, que quedó fuera de la Q3 con sus dos coches, algo impensable… y encima en casa, en Imola.

El resultado no solo rompe una racha nefasta para los de Silverstone, sino que confirma que el paquete de siete mejoras aerodinámicas introducido este fin de semana ha funcionado. Y de qué manera, pues encima han pasado a la Q3 con el medio, sin poner el C6. Tras haber sido el peor equipo en carrera en Miami —con ambos coches doblados y sin ritmo—, el salto adelante es evidente. Stroll fue el encargado de probar las piezas nuevas en los entrenamientos libres del viernes, y este sábado las estrenó también Alonso, que no había rodado con ellas hasta la FP3.

El nuevo túnel de viento de última generación, operativo desde principios de 2025, empieza a rendir frutos. Por primera vez desde 2023, un paquete de actualizaciones ha permitido al equipo dar un paso real hacia delante, y los tiempos en clasificación así lo demuestran.

Mientras tanto, Ferrari protagonizó uno de sus peores sábados en mucho tiempo. En el circuito Enzo e Dino Ferrari, frente a miles de tifosi, Charles Leclerc y Lewis Hamilton cayeron eliminados en la Q2, un resultado catastrófico para un equipo que soñaba con luchar por la pole. Las caras largas en el box rojo lo decían todo. Tampoco se salvó Andrea Kimi Antonelli en Mercedes tampoco pudo pasar el corte.

En Aston Martin no quieren lanzar las campanas al vuelo, pero la clasificación de Imola ha dejado señales claras de que el coche ha mejorado. Ahora falta confirmar ese paso adelante en carrera, donde la gestión de neumáticos y el ritmo real marcarán la diferencia.