Cómo Ferrari se ha adelantado a Red Bull con su alerón flexible

Un mes sin F1 a estas alturas de la temporada significa un mes de rearme y mucho trabajo para los equipos punteros, ya que están preparando para Austin sus últimos paquetes de mejoras para la temporada 2024, con todavía seis carreras por disputarse.

Ferrari afrontará el GP de Estados Unidos con cierta confianza, aunque el trazado americano no sea, a priori, uno de los que más se adaptan al SF-24. El monoplaza rojo ha dado un paso adelante y ha eliminado las dudas que tenían en verano y quiere colocarse como como la segunda fuerza en persecución de McLaren, mientras Red Bull sigue sin encontrar el camino de desarrollo.

Los puntos que sumó Ferrari en las carreras de Monza, Bakú y Singapur fueron menos de los esperados: al éxito de Charles Leclerc en el GP de Italia le siguió un segundo puesto en Azerbaiyán y, por último, se produjo el decepcionante resultado de Marina Bay, donde el equipo de Maranello aspiraba a tener dos coches en el podio pero terminaron quinto y un séptimo.

McLaren, en esas tres carreras, ha sumado 112 puntos, por los 71 de Ferrari, 54 de Mercedes y 41 de Red Bull. Los números dicen, por tanto, que Ferrari es la segunda fuerza en estos momentos.

Pensar en luchar con el equipo dirigido por Andrea Stella por el título de constructores es una quimera, mientras que el objetivo de acabar como subcampeón podría ser factible, dado que la distancia con el equipo de Milton Keynes es de sólo 34 puntos.

Ferrari SF-24 dañado por Carlos Sainz en la Q3 de Singapur

Foto de: Lionel Ng / Motorsport Images

Para luchar por objetivos más ambiciosos, nos números dicen que Ferrari deben empezar a sumar puntos importantes con sus dos pilotos, y Carlos Sainz no ha subido al podio desde el GP de Austria, es decir, hace siete carreras. Claro que en Monza el madrileño ayudó a Leclerc para frenar la remontada de Oscar Piastri, pero en Bakú tiró por la borda un segundo puesto tras un accidente con Sergio Pérez y en Singapur lo destrozó todo con un accidente en la Q3.

El madrileño da la clara impresión de haber aceptado el papel de segundo piloto de Charles de cara a sus últimas carreras con Ferrari, pero todavía podría aspirar a conseguir grandes resultados con un SF-24 que ha crecido bajo los "cuidados" de Fred Vasseur, quien a su vez ha coordinado a Diego Tondi, Fabio Montecchi y Marco Adurno para conseguir la remontada ya en ausencia de Enrico Cardile.

A partir del próximo martes, los galones de ser el director técnico pasarán a manos de Loic Serra, que se incorpora a Ferrari con su gran experiencia adquirida en Mercedes: el francés, según los rumores, no se meterá a trabajar con el SF-24, sino que lo hará directamente con el coche de 2025 y, sobre todo, estará al frente el equipo técnico que trabaje en el proyecto de 2026.

Tampoco Leclerc está exento de críticas: el desaguisado en la Q3 de Singapur dejó a Ferrari fuera de la lucha por la primera fila y el podio, echando por tierra los esfuerzos que se habían hecho en Maranello para anticipar el estreno del nuevo alerón delantero, que incorpora la flexión que tanto ha dado que hablar en el McLaren.

Tanto el departamento de aerodinámica como el de compuestos habían obrado milagros para que los dos coches estuviesen en condiciones de luchar con McLaren en Marina Bay, pero los dos pilotos pensaron que lo mejor era arruinarlo todo.

Austin, por tanto, se convertirá en una carrera estratégica: cada equipo de la zona delantera de la parrilla introducirá sus últimas actualizaciones. Pero McLaren y Mercedes ya han aprendido todas las lecciones necesarias sobre los alerones delanteros flexibles, mientras que Ferrari y Red Bull intentarán recortar distancias y ponerse al día cuanto antes.

Charles Leclerc, Ferrari SF-24

Foto de: Lionel Ng / Motorsport Images

Los italianos, que han adelantaron el estreno del alerón y ya lo pudieron usar en Singapur, tendrán la ventaja sobre Red Bull de poder analizar los datos recogidos, en busca de una configuración perfecta para la solución más extrema que permite el reglamento de la Fórmula 1 en 2024.

Ferrari, ahora que ha encontrado un buen equilibrio en el SF-24, no tiene previsto tocar el suelo, pero está trabajando en otros pequeños cambios útiles que el coche se equilibre en las diferentes pistas que componen el tramo final del calendario.

El potencial para ganar a Red Bull debería estar ahí. Habrá que ver si el equipo es capaz de traducir en puntos el esfuerzo que se está haciendo en Maranello: el año pasado Ferrari acabó tercero en el campeonato de constructores, por lo que ser segundo sería un paso adelante.

¿Pero poner en el punto de mira en lo que parecía un inexpugnable Red Bull es ilusionante o tras el bajón de los austriacos es simplemente una forma de contentarse y conformarse con algo?