Márquez: "En la salida no sé ni lo que he hecho"

Marc Márquez ofrece espectáculo incluso sin quererlo. Este sábado, él solito se metió en un lío en los segundos previos a la arrancada de la prueba corta, que le llevó a tener que arremangarse. Ocurre que su superioridad le ofrece un colchón tan grande que le permite resarcirse de un incidente que sería la sentencia para cualquier otro que no fuera él.

Plantado en la pole position, el español no supo interpretar si había activado correctamente el control de salida de su Ducati, cuando ya tenía trincada la leva del embrague con su mano izquierda. Eso le llevó a soltar la derecha del otro semi manillar, para toquetear la piña repleta de botones, sin saber muy bien cómo acabaría la cosa. Cuando llegó el momento de dar gas, el #93 perdió algunas décimas respecto del resto de la parrilla, y se vio el séptimo al encarar la primera curva del trazado. El jaleo que se formó con la carambola entre Brad Binder y Johann Zarco, y su agresividad en los primeros instantes de la carrera le llevó a recolocarse el tercero ya al primer paso por meta.

Un delicioso rifirrafe a tres, con Pecco Bagnaia y Alex Márquez, su hermano, precedió al adelantamiento sobre el #73, en el cuarto giro, que le posicionó al frente del pelotón. A partir de allí, el multicampeón se dedicó a controlar a Alex con el rabillo del ojo y marchó directo hacia su octavo triunfo al sprint.

"Aún tengo que mirar qué ha pasado. Pensaba que el control de salida [launch control] estaba desactivado, pero no sé realmente si lo estaba o no. Y la verdad es que no sé ni lo que he hecho", resumió Márquez, que asumió la responsabilidad absoluta del incidente. "Cuando ese modo está activado aparece un mensaje en la pantalla, y no sé si lo he leído, o no. Pero ha sido error mío. Por suerte lo he podido salvar, pero tengo que asegurarme de no repetirlo mañana", advirtió con vistas a la carrera larga.

Esta victoria, combinada con la segunda posición de Alex y la tercera de Bagnaia le permite al de Cervera (Lleida) aumentar su renta de puntos al frente de una tabla que ahora comanda con 35 puntos sobre el corredor de Gresini Racing, y con 98 puntos sobre su compañero de equipo.

"Alex y yo demostramos tener ritmos muy similares. Sabía que él era el hombre a batir. De todas formas, el objetivo era perder los menos puntos posibles con ellos y la realidad es que hemos ganado alguno más, de modo que mañana conformarse no será un problema", advirtió Márquez.