Por qué las reglas de la F1 para 2026 son "una oportunidad real"

Los nuevos reglamentos de la Fórmula 1 para 2026 ha convencido a los fabricantes: el director de motores de Mercedes, Hywel Thomas, habla de una gran "oportunidad", que otros también ven. Honda ha vuelto a su fábrica y se asociará con Aston Martin, mientras que Audi se hará cargo de Sauber y ya lo utiliza como su propio equipo de trabajo.

Pero, ¿qué tiene de atractivo el reglamento técnico de 2026? La mejor demostración es la lista de innovaciones previstas, que incluye numerosos puntos. Y en Motorsport.com analizamos los cambios más importantes.

Probablemente, lo más relevante en primer lugar es que según el reglamento de la Fórmula 1 de 2026, la potencia ascenderá probablemente a 1.000 CV. Alrededor de la mitad de esta potencia procederá del motor de combustión V6 de 1,6 litros, que se mantendrá estable en gran medida respecto a la normativa anterior.

La otra mitad la generarán los componentes eléctricos, cuya importancia ha aumentado: A partir de 2026, el sistema de recuperación de energía cinética captará y convertirá aún más energía de frenado, de modo que este sistema ya no proporcionará sólo 120 kW, sino a 350 kW, es decir, prácticamente el triple que con el reglamento de motores anterior.

En otros sentidos hay reducciones: La unidad motor-generador de energía térmica (el MGU-H) dejará de existir en 2026. Ese sistema de recuperación convertía la energía térmica del flujo de gases de escape en energía eléctrica y la introducía en el sistema de propulsión. Sin embargo, gracias a la eliminación del MGU-H, los costes se reducirán bastante, lo que ha sido clave a la hora de convencer a nuevos fabricantes para que se unan a la máxima categoría.

La FIA quiere reducir los gastos de los motores en 2026

Para ello, la FIA ha elaborado un reglamento financiero para las unidades de potencia de la F1. Eso significa que un fabricante no podrá invertir todo el dinero que quiera en el desarrollo, así como también deberá organizar cuidadosamente su tiempo en los bancos de pruebas.

Por otro lado, en 2026 se aplicarán ciertas restricciones a los materiales más caros y también habrá piezas estandarizadas entre los fabricantes. La FIA también quiere reducir así los gastos.

Sin embargo, los fabricantes tienen un gran reto en el otro extremo del ciclo de producción: al final de su vida útil, no sólo deberán reciclar las baterías, sino también el cobalto utilizado.

Más sostenibilidad en la F1 gracias al nuevo combustible

Mientras tanto, la compatibilidad medioambiental de la Fórmula 1 en los circuitos se va a acentuar con el uso de un combustible 100% sostenible. El futuro combustible se está desarrollando junto con la reconocida empresa ¡saudí Aramco y debería poder ser útil también para los coches de calle, otra de las claves de este nuevo reglamento.

Los residuos o el CO2 de la atmósfera, por ejemplo, sirven de base para el nuevo combustible de la Fórmula 1. El carbono fósil ya no se tiene en cuenta en el nuevo ciclo de normas.

Sin embargo, el nuevo combustible debería tener un rendimiento mucho mejor que los anteriores: la Fórmula 1 quiere consumir una cantidad de combustible de unos 70kg en cada carrera, es decir, más o menos cada 300 kilómetros.

A modo de comparación: antes de la era turbohíbrida, un coche de Fórmula 1 consumía unos 160 kg de combustible por carrera en 2013. Mientras que en 2020, rondaba los 100 kg.

El retraso del turbo puede reaparecer en la F1

Siguiendo la línea de la mayor electrificación del sistema de propulsión, la Fórmula 1 ya no utilizará un limitador de caudal a partir de 2026, sino un limitador de cantidad de energía. Esto puede ir acompañado de una reaparición del llamado "turbo lag".

El "turbo lag" ya era un fenómeno conocido en la primera fase turbo de la Fórmula 1 en los años 80: el piloto acelera a la salida de una curva, pero no recibía inmediatamente de toda la potencia. Eso se debe a que el motor no alcanza inmediatamente las revoluciones necesarias para el turbo.

Pilotar un F1 con turbo lag se considera más exigente, por lo que eso podría crear carreras más interesantes. En consonancia con eso, los motores de 2026 con una potencia de 1.000 CV también deberían ser algo más ruidosos que las actuales unidades de potencia de Fórmula 1.

No todos los empleados de F1 han vivido algo así

Thomas, jefe de motores de Mercedes, tiene que poner en práctica todos estos detalles junto con su equipo, pero ya está deseando que lleguen "tiempos emocionantes", ya que después de todo, los cambios de reglas sólo se producen "cada diez años más o menos". Y así es: el último gran cambio de reglas para los motores se remonta a 2014 y dio inicio a muchos años de un gran dominio de Mercedes con Lewis Hamilton.

Sin embargo, en esta ocasión, las señales son diferentes, dice Thomas: "Hay quienes ya tenemos experiencia [con un cambio de reglamento de este tipo]. Pero también hay gente que no lo ha experimentado nunca".

El atractivo de las nuevas reglas de la F1

Por otro lado, las nuevas reglas son emocionantes para todos los implicados y "dan un empujón a todo el mundo", dice Thomas. Su razonamiento es el siguiente: "Es una verdadera oportunidad para ver de lo que eres capaz desde el punto de vista técnico".

Para los técnicos e ingenieros, el desarrollo en particular es "una época maravillosa", con "trabajo duro y muchos contratiempos", pero también agradecida por los progresos que se consiguen. "Al final, te anima a trabajar en un nuevo producto y poner en práctica ideas [de los últimos años] y ver cómo dan sus frutos", añadió.

Lo más interesante desde el punto de vista del fabricante es la "clara referencia a la práctica", subraya Thomas. Las nuevas reglas de de la Fórmula 1 son "aplicables a lo que ocurre en Mercedes y en nuestros departamentos de investigación y desarrollo. Estamos ante una "perspectiva fascinante y es una oportunidad [para] el talento y la innovación".

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