Cómo Haas F1 triunfa en lo que Ferrari y Aston Martin sufren

Haas F1 Team ha superado con creces las expectativas con las que empezó la actual temporada de Fórmula 1, ya que esperaban estar de forma constante en la parte trasera de la parrilla.

Con dos sextos puestos consecutivos de Nico Hulkenberg, el equipo americano se ha colocado como el más destacado de la zona trasera de la parrilla y ahora está inmerso en una reñida lucha con RB por el sexto puesto en el campeonato de constructores.

Pero lo que es importante entender sobre el sorprendente progreso de Haas este año es el hecho de que no se trata de una historia en la que el equipo simplemente hace un coche mejor desde el principio y recoge los frutos de ello.

Por el contrario, aunque su VF-24 es una mejora respecto a su predecesor, la clave de su mejora de forma ha estado en la forma en que ha conseguido mantener la trayectoria de su programa de desarrollo durante la temporada.

Y ese progreso constante ha tenido un gran impacto porque es algo que otros equipos no han podido conseguir. Después de todo, este es un año en el que las actualizaciones se califican de "mejoras" o "peoras" en función de su éxito.

Por ejemplo, Ferrari ha tenido algunos quebraderos de cabeza con un nuevo suelo que introdujo en el Gran Premio de España y que les ha hecho perder varios meses de desarrollo. Y Aston Martin descubrió que un nuevo paquete que introdujo en el Gran Premio de Emilia Romagna hacía que su AMR24 fuera más difícil de pilotar, lo que también les ha lastrado un largo periodo de tiempo.

Para ambas escuderías, volver al camino correcto es difícil porque las nuevas piezas han tenido efectos positivos en términos de carga aerodinámica, pero han provocado consecuencias imprevistas que han limitado las ganancias del coche en el mundo real con perjuicios que no se ven en el túnel de viento.

Pero cómo la escudería más pequeña de la F1 [Haas] se las ha apañado tan bien, mientras que sus rivales que tienen un mayor presupuesto pasan apuros, es un tema intrigante, y para el que la propia escudería no tiene una respuesta sencilla.

El jefe de Haas, Ayao Komatsu, dice que no hay nada que él crea que su equipo está haciendo que los demás no estén haciendo, pero sospecha que simplemente se reduce a una nueva mentalidad que se ha inculcado este año.

A la pregunta de cuál es el secreto del éxito de Haas, respondió: "No lo sé, la verdad, lo único que podemos decir es que trabajamos juntos. Incluso cuando traemos nuevas piezas, como la secuencia de actualizaciones que llegó después de Miami, en realidad no conseguimos todo lo que pensábamos según los números del túnel de viento y del CFD".

"Pero, como equipo, cuando nos reunimos [para hablar de las nuevas piezas que no dieron todo lo que esperábamos], lo que me animó fue que nadie lo negaba ni nada así. En lugar de eso, decían: 'Vale, aceptamos que esto es así, ahora tenemos que entender por qué'".

"Una vez que lo aceptas y todo el mundo se esfuerza por entenderlo, puedes aplicar ese aprendizaje a la siguiente actualización. Así que si hay un secreto, ése es uno de ellos. Todo el mundo trabaja con transparencia, sin culpar a nadie", explicó

Este progreso constante que Haas ha sido capaz de hacer con sus actualizaciones este año contrasta con cómo han sido las cosas en el equipo en estas últimas temporadas.

El año pasado, un importante paquete de desarrollo llevado que llevaron al Gran Premio de EE.UU. no funcionó y eso quedó claro en Abu Dhabi cuando Hulkenberg, que había vuelto a la antigua especificación, superó cómodamente en la clasificación a Kevin Magnussen.

Romper esa tendencia histórica es muy importante para Komatsu y cree que además eso podría ayudar a desbloquear aún más rendimiento en el futuro.

"En la prensa, la gente decía que nuestros pilotos no podían mejorar el coche, pero ahora hemos demostrado que sí y nadie puede negar que hemos mejorado el rendimiento del coche. Eso también debería darles mucha confianza".

El tema subyacente es que Komatsu cree que el equipo está aprovechando un potencial que, en su opinión, lleva tiempo sin explotar.

Y añade: "Lo he dicho desde el primer día. Tenemos gente con talento, de verdad, pero sólo era cuestión de unirla. Y eso es un problema de dirección. Una vez que lo hemos resuelto y les hemos dejado trabajar, éste es el resultado. El equipo sigue siendo el mismo y no hemos cambiado a tanta gente. Está bien, se ha ido Simone Resta [director técnico], pero aparte de eso, no hay muchos cambios".

"La estructura ha cambiado y hemos recolocado a algunas personas, pero en realidad se trataba más de crear el ambiente. Y ahora estamos contratando al personal, así que pronto seremos un equipo más grande. Pero incluso con los mismos recursos que el año pasado y más o menos la misma gente, mejoramos notablemente. Es increíble, ¿no? Por eso estoy tan contento".

"Si hubiera hecho un cambio radical y hubiera conseguido esto, creo que no me sentiría tan bien. Porque simplemente sabía, creía, que teníamos buena gente. Y me sentía frustrado y mal porque esa gente estaba teniendo muy mala prensa, interna y externamente. Por eso me alegro tanto", finalizó.