Nicolò Bulega ha saldado con nota positiva su debut en el Mundial de MotoGP. El piloto italiano comenzó el fin de semana siendo más rápido que Pecco Bagnaia, no se quedó lejos de pasar a a la Q2 el sábado, día en el que acabó cayéndose en la sprint por animarse demasiado para ser su primer fin de semana de carreras, y cerró el gran premio con una nota más positiva.

El vigente subcampeón del mundo de Superbikes sumó un punto en la carrera larga del domingo, al terminar 15º a 32 segundos del ganador, Marco Bezzecchi, y a apenas unas décimas de Miguel Oliveira, en su despedida del GP de Portugal. Tras bajarse de su Ducati, Bulega destacó por encima de todo la adaptación a la MotoGP al haber podido sumar kilómetros de forma continuada, después de que el test de Jerez en el que pilotó por primera vez estuviera pasado por agua, más allá del resultado.

"Aparte del punto, que no es tan importante, lo más importante es que en la parte final de la carrera había empezado a coger un poco de confianza. Era mi primera carrera larga, y en parte por el tiempo y en parte por algunos errores que había cometido, nunca había conseguido mantenerme sobre la moto durante [mucho] tiempo. Aunque era una carrera, yo la llamo un relevo, y fue en la que más cosas entendí, porque me quedé más tiempo sobre la moto", empezó diciendo Bulega.

"Si te fijas en los tiempos, hice mi vuelta rápida a falta de dos giros, cuando los neumáticos ya no daban más de sí. Al final hay cosas positivas, aunque lo de ayer [sábado] no me ayudó, porque me quitó algo de confianza. De hecho, me lo he tomado con mucha calma en las primeras vueltas, tenía muchas ganas de calentar bien los neumáticos, porque si hubiera vuelto a cagarla como ayer no habría estado nada contento. Hoy [domingo], el objetivo era terminar la carrera y entender un poco más cómo pilotar y adaptarme a la moto".

A la pregunta de si fue un debut más fácil o difícil de lo que esperaba, reiteró que lo más complicado fue adaptarse a los neumáticos: "Más o menos esperaba que fuera así. No tanto por la moto, por lo que tengo que hacer, sino más por los neumáticos, que son lo más difícil para mí en este momento. En Superbikes estamos acostumbrados a algo completamente diferente. Con Pirelli puedes hacer cosas que no puedes hacer con Michelin, con ellos tienes que hacer exactamente lo contrario. Es como si uno tuviera que aprender a pilotar de nuevo".

Nicolo Bulega, Ducati

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"Hice toda la carrera pensando: 'No frenes fuerte'. Porque ayer, cuando me caí, iba fuerte, pero pilotaba instintivamente, como hago con los Pirelli. Hoy, he tenido un enfoque ligeramente diferente, sólo quería terminar la carrera, pero sigo conduciendo pensando mucho. Hacia el final he ido mejor, lo que significa que poco a poco he ido ganando confianza, pero en MotoGP no te subes y te pones directamente en cabeza. Si fuera así, todo el mundo estaría en MotoGP", prosiguió sobre las diferencias con WorldSBK.

Sin embargo, un fin de semana no ha sido suficiente para entender si realmente tiene lo que se necesita para ser un piloto de MotoGP o no: "Es demasiado pronto para decirlo. Seguro que en este momento siento un gran margen [de mejora], porque sigo pilotando muy mal, no consigo hacer una buena salida. Sigo haciendo muchas cosas que son errores de alguien sin experiencia. Espero que corrigiendo muchas, o incluso simplemente manteniéndome sobre la moto, pueda mejorar automáticamente".

Por último, también se le incidió por las dificultades que vive su compañero Pecco Bagnaia, que un día más volvió a acabar en el suelo: "En mi opinión, ni siquiera él lo sabe. No creo que un piloto sea tan inestable, porque ha tenido carreras malas alternadas con otras buenas. Creo que es muy fuerte y, si lo hace todo bien, es muy difícil ganarle. Sólo tiene que intentar entender por qué no siempre encuentra las mismas sensaciones, pero desde fuera me resulta difícil decir por qué. Pero el día que recupere la confianza al 100%, habrá pocos que puedan ganarle".