John Bennett no tuvo una buena salida desde la pole: aceleró lentamente y acabó saliéndose a la escapatoria. Las repeticiones también mostraron que el joven piloto de McLaren, Alex Dunne, se adelantó antes de que se apagasen las luces rojas, por lo que fue investigado de inmediato.

Bennett cayó hasta la quinta posición tras la primera curva, y Dunne lo atacó enseguida, pero eso solo provocó que también se saliera de pista, perdiendo dos posiciones más y cayendo hasta la octava plaza.

Aparte de eso, el resto del pelotón pasó limpio. Marti fue quien salió mejor de las curvas 2 y 3, lo que le permitió colocarse segundo. Algunos pilotos se fueron largos, pero los mayores incidentes no llegaron hasta la segunda vuelta.

Fue entonces cuando, desde la cámara a bordo del supertalento de Red Bull, se vio cómo Sami Meguetounif, que llegó como un “cohete” por el interior en la curva 3, embistió lateralmente a su rival, volcó y siguió deslizándose.

Debido a lo aparatoso del accidente, las imágenes no se repitieron durante un rato, y solo se mostraron de nuevo cuando se confirmó que todos los implicados estaban bien.

Lo que es seguro es que el halo hizo su trabajo: Lindblad le debe mucho a ese dispositivo. Inmediatamente se mostró la bandera roja, y durante mucho tiempo se trabajó para retirar los coches, ya que además de aceite había muchos restos en el asfalto.

Según la información disponible, se planearon 2 vueltas tras el coche de seguridad, después de las cuales la carrera se reanudaría con salida lanzada. El reinicio lo lideraba Durksen, seguido de Marti en segundo lugar.

La reanudación se produjo con 33 minutos restantes en el cronómetro o un máximo de 28 vueltas. Durksen hizo una buena salida, y Marti tuvo que vigilar por los retrovisores. Solo hizo falta una vuelta para que apareciera otro coche de seguridad: Beganovic chocó y destrozó su coche.

Dunne recibió una penalización de 5 segundos por su salida anticipada. En el segundo reinicio, 17 pilotos esperaban tras el coche de seguridad. Durksen reaccionó bien de nuevo, mientras Stanek atacaba a Marti. Las penalizaciones comenzaron a llover, varios pilotos fueron sancionados con tiempo.

En la vuelta 10, Montoya realizó una buena maniobra y se colocó noveno. Dunne, a pesar de su sanción de 5 segundos, intentó adelantar al coche de Martins, aunque este le devolvió la maniobra. Más tarde volvieron a protagonizar un duelo entretenido, se tocaron, y finalmente Dunne superó al rival.

En la vuelta 17, se desató una gran lucha por el liderato: Marti adelantó a Durksen, pero este recuperó la posición gracias a una mejor salida de curva. Esta pelea permitió que los perseguidores se acercaran, esperando sacar tajada.

Marti volvió a adelantar a Durksen en la vuelta 18, mientras Stanek, aprovechando el doble rebufo, intentaba ser el "tercero en discordia". Al final, las posiciones del trío de cabeza se estabilizaron, y hasta Dunne, que iba undécimo, estaba a menos de un segundo del piloto que tenía delante.

Los pilotos no superaron el límite de tiempo, y la carrera duró exactamente 28 vueltas, por lo que se completó. Al final, Mini hizo un gran adelantamiento por la sexta plaza, y Bennett se centró en asegurar al menos acabar en zona de puntos.

En la última vuelta, Cordeel cometió un error grave cuando rodaba cuarto: se trompeó en la curva 3 y varios pilotos que venían detrás se estrellaron contra su coche. Gracias a eso, Montoya y Dunne escalaron hasta la quinta y sexta posición respectivamente. La carrera, caótica de principio a fin, fue ganada por Marti, seguido de Durksen y Stanek.