Al Attiyah espera ganar el título mundial con el nuevo Dacia Sandrider

Queda muy poco para el inicio de una nueva edición del Rally Dakar, pero los equipos primero realizarán los últimos ajustes en sus vehículos en el Rally de Marruecos, en donde Dacia estrenará su novedoso Sandrider con una alineación de pilotos de ensueño, con la que suman hasta seis trofeos Touareg.

Nasser Al Attiyah, Cristina Gutiérrez y Sébastien Loeb intentarán defender el orgullo de la marca que se une al desierto, y tras cinco sesiones de entrenamientos dirigidas por Tiphanie Isnard, irán a por todas en los 2.468 kilómetros de prueba en tierras africanas. Para hacerse con la conquista de la que sería su primera corona, quieren "caminar antes que correr", por lo que será el escenario de pruebas ideal para seguir desarrollando el coche.

Uno de sus grandes apuestas es la del qatarí, que querrá ganar su sexto Rally Dakar, y utilizará esta semana en el Rally de Marruecos para acumular experiencia con el vehículo: "El Rally de Marruecos es crucial, no solo para el campeonato, sino también para los equipos, porque todos se están preparando para el Dakar. Actualmente estamos liderando el campeonato, así que tenemos que ser inteligentes, mantener un buen ritmo, sin correr riesgos innecesarios".

"El Sandrider es un coche nuevo y tenemos que mejorarlo día tras día. Espero ganar el título mundial, sería una bonita recompensa para mi copiloto Edouard [Boulanger] y para mí", explicó el cinco veces ganador del trofeo Touareg.

A él se une la defensora del galardón del desierto en Arabia Saudí, la española que estará en su primera participación en la máxima categoría: "Esta será nuestra primera carrera con el Sandrider después de una larga serie de entrenamientos, y tengo muchas ganas de que llegue este momento. Esta es también mi primera carrera en una nueva categoría, ya que paso de los 'Challenger' a los 'Ultimate'".

"Así que hay muchas cosas nuevas, un coche nuevo, una nueva categoría y un nuevo equipo, aunque ya me siento muy cómoda con los Dacia Sandriders", explicó. "Espero que podamos hacer realidad todo el trabajo realizado durante los entrenamientos. Por supuesto, siento algo de presión, pero es positiva y me empuja a dar lo mejor de mí, será una carrera preparatoria para el Dakar, y espero que consigamos un buen resultado a la vez que nos divertimos".

Por su parte, el nueve veces campeón del WRC, busca su primer triunfo en el desierto, tras todos sus anteriores intentos, y lo hace con un proyecto muy ilusionante: "Después de meses de trabajo en entrenamientos, al fin ha llegado el momento de medirnos con la competencia y ver en qué punto estamos en términos de rendimiento".

"También es el comienzo de una nueva aventura con un gran equipo, este rally es una prueba a tamaño real, un auténtico ensayo antes del Dakar", dijo. "El objetivo principal es comprobar que todo está listo y funciona bien. Si no, tendremos la oportunidad de identificar los problemas y resolverlos antes de enero, pero si tenemos la oportunidad de lograr un buen resultado, será aún mejor".

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