Viñales: “Cuando las cosas no salen no sirve de nada ponerse nervioso”
Maverick Viñales no esconde la frustración que le supuso no poder mantener durante toda la temporada el nivel de competitividad que demostró en sus primeros meses en Yamaha.
Foto de: Gold and Goose / Motorsport Images
El español voló en pretemporada y llevó esa inercia a las dos primeras citas del campeonato (Qatar y Argentina), en las que encadenó sus dos primeras victorias como piloto de la marca de los diapasones.
Sin embargo, los problemas de falta de tracción en condiciones de poco agarre tomaron cuerpo a partir de entonces, y el rodillo que hasta ese momento había pasado el corredor de Roses (Girona), comenzó a perder contundencia.
Las primeras dudas se convirtieron en incredulidad por la falta de reacción de Yamaha ante los problemas que presentaba la moto. Los distintos chasis que se fueron introduciendo no terminaron de solucionar el problema, y así, carrera a carrera, las posibilidades de que la marca de los diapasones coronara campeón a uno de sus pilotos se fueron diluyendo hasta esfumarse completamente.
Viñales pasa por ser uno de los pilotos más claros del paddock, y en ese sentido no tiene ningún problema en reconocer la frustración que le generó verse como uno de los principales candidatos a pelear por el título, y que por la falta de consistencia de su M1 no fuera capaz de mantener ese nivel inicial a lo largo de los nueve meses que duró el Mundial –el #25 terminó el tercero en la tabla, a 68 puntos de Márquez, el campeón–.
A pesar de ello, Viñales opina que el grupo humano que tiene a su alrededor hizo todo lo que estaba en sus manos para revelarse contra esa situación.
“Está claro que estoy muy decepcionado por haber comenzado el Mundial tan fuerte y no haber podido mantener ese nivel. Pero cuando las cosas no salen no sirve de nada ponerse más nervioso de lo que es necesario. Soy el primero que quiere ganar el Mundial y seguramente de los pilotos que más ambición tiene”, comenta Viñales en declaraciones a Motorsport.com.
“Pocos pilotos tienen tantas ganas de vencer como yo. Pero en los momentos malos no sirve de nada dar un puñetazo encima de la mesa si ves que dentro del box están dando el 100%. No les puedo pedir más. En un mismo fin de semana llegamos a cambiar la moto de arriba abajo y ni eso funcionó”, zanja el catalán, que estos días disfruta de unos días de vacaciones en las islas Seychelles.
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