Las mejores historias de 2017, 10: La meteórica recuperación de Valentino Rossi
La noche del 31 de agosto de 2017 la noticia de una grave lesión de Valentino Rossi dejaba sin aliento a los aficionados al motociclismo. El italiano, sin embargo, protagonizó una recuperación de récord.
La noticia estalló como una bomba la noche del 31 de agosto: Valentino Rossi se ha lesionado de gravedad. Las primeras informaciones que llegaban desde Italia eran confusas, hasta que el equipo Yamaha confirmaba la magnitud de la noticia, el piloto italiano se había accidentado practicando motocross con sus amigos en los alrededores de Tavullia y había sufrido una fractura desplazada de tibia y peroné en su pierna derecha, de la que estaba siendo tratado en Ospedale Civile di Urbino. Esa misma noche iba a ser intervenido quirúrgicamente.
La madrugada del jueves al viernes 1 de septiembre, Rossi fue transferido al Hospital Universitario Riuniti de Ancona, donde fue operado por el doctor Raffaele Pascarella, director de la división de traumatología del citado centro.
Pese a que la operación resultó ser un éxito, las previsiones más optimistas aseguraban que, como mínimo, iba a perderse las siguientes dos carreras del calendario, los grandes premios de Misano y Aragón.
Recuperación milagrosa
Pero los planes de Valentino Rossi eran muy diferentes a la versión médica. Con el Mundial aún en juego y el italiano peleando por su décima corona, Rossi afrontó la rehabilitación de su maltrecha pierda derecha (la misma que se lesionó en 2010) con el entusiasmo de un joven de 20 años, luchando para acortar los plazos.
Rossi se perdió su gran premio de casa, en San Marino, y Yamaha, obligada por el reglamento, buscó un sustituto para la carrera de Aragón, que era, sobre el papel, la segunda que iba a perderse el de Tavullia. El elegido fue el holandés Michael Van Der Mark, que nunca llegó a subirse a la M1 del #46.
Pero el 20 de septiembre, sólo 18 días después de haber recibido el alta médica tras ser operado la madrugada del 1 de ese mismo mes, Valentino anunciaba su decisión de viajar a Motorland y probarse el viernes en el primer entrenamiento libre del Gran Premio de Aragón.
La noticia dejó estupefacto al personal, pero la intención del italiano se basaba en dos factores clave, sus enormes ganas de volver a la competición y una recuperación que los médicos calificaron de “milagrosa”.
El jueves del gran premio Rossi pasó la revisión por parte de los médicos del circuito y fue declarado apto para salir el viernes a la pista, sólo 21 días después de la operación. Una salida que fue, curiosamente, en condiciones de mojado, más peligrosas al ser más fácil sufrir una caída, pero menos arriesgadas si se produjese, ya que en mojado se va más despacio y no acostumbra a haber lesiones.
Valentino fue de menos a más en los entrenamientos, algo por otro lado habitual en él desde hace algunos años, y no sólo logró hacer unos buenos entrenamientos, si no que se metió en la primera final de la parrilla de salida del gran premio al conseguir el tercer mejor tiempo en la Q2 cronometrada oficial del sábado, rematando un fin de semana impresionante el domingo con un brillante quinto puesto sólo superado por Márquez, Pedrosa, Lorenzo y Viñales, y apenas 23 días después de haber pasado por el quirófano fruto de una doble fractura de tibia y peroné. Y todo ello con 38 años… Sin duda, una de las gestas del año y merecedora de estar en nuestras mejores historias de 2017.
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