Christian Horner, oficialmente destituido como director de Red Bull F1

Christan Horner ha dejado oficialmente su cargo de director de las distintas entidades británicas de Red Bull, cuando ya ha pasado un mes desde su sorprendente despido.

Horner fue destituido de sus cargos como director del equipo Red Bull y como CEO pocos días después del Gran Premio de Gran Bretaña, con su mandato de 20 años en Milton Keynes llegando a su fin después de que los accionistas de la empresa optaran por hacer un cambio.

Con la parte austriaca de la compañía tratando de reafirmar un mayor control sobre el mandato de Horner, la empresa matriz nombró al ex jefe del equipo Racing Bulls, Laurent Mekies, como su sustituto, con un enfoque más estrecho en Red Bull Racing.

En ese momento, Horner fue destituido de sus funciones operativas con efecto inmediato. Pero sobre el papel seguía siendo empleado del equipo como director de varias entidades en el Registro de Sociedades del Reino Unido, incluyendo Red Bull Racing, Red Bull Technology, Red Bull Powertrains -que se encarga de los actuales motores fabricados por Honda-, así como Red Bull Powertrains 2026.

Sin embargo, en las últimas 48 horas, Horner ha sido cesado oficialmente como director de esas cuatro empresas, lo que sugiere que la empresa ha acordado ya los detalles de la indemnización con el directivo de 51 años.

Max Verstappen, Red Bull Racing, Christian Horner, Red Bull Racing

Foto: Toshifumi Kitamura - AFP - Getty Images

En el momento de la destitución de Horner, en julio, Stefan Salzer, durante mucho tiempo jefe global de RRHH de Red Bull, fue añadido a las cuatro entidades como director por razones administrativas. Bajo la dirección de Horner, Red Bull ganó ocho campeonatos de pilotos, cuatro cada uno durante las rachas de dominio de Max Verstappen y Sebastian Vettel, así como seis coronas de constructores.

Horner también fue el centro de la polémica el año pasado, por un supuesto comportamiento inapropiado contra una empleada, una investigación interna de la que fue absuelto. Pero el asunto sembró más división entre Horner y la dirección austriaca de la empresa, que empezó a recelar del poder que había logrado en los últimos años.

Tras sustituir a Horner por Mekies en su escudería principal, Red Bull nombró a Alan Permane como su sucesor en la escudería B, dejando el cargo de director de carreras.