DS Penske se recupera del abismo en el ePrix de Mónaco

El escenario no es perfecto, pero hay que valorar positivamente lo sucedido en un E-Prix de Mónaco trepidante, que podría haber acabado incluso mejor para el equipo franco-americano.

Si los dos coches de seguridad al final de la carrera, incluido el que cruzó la línea de meta, no hubieran enturbiado las aguas, el resultado podría haber sido diferente.

Para entender lo que pasó, vale la pena recordar que los líderes del campeonato tuvieron una gran actuación en ambas sesiones de entrenamientos libres.

El piloto de Jaguar Mitch Evans, el campeón 2021-22 Stroffel Vandoorne (DS Penske) y el de Maserati MSG Maximilian Gunther, galvanizado por su podio en Berlín, estuvieron al frente de la primera sesión, en la que tuvieron unas condiciones ideales.

La segunda sesión confirmó las primeras impresiones, con Gunther marcando el mejor tiempo, por delante de Evans y Jake Dennis (Avalanche Andretti).

Los dos coches de DS Penske se situaron entre los 10 primeros y se esperaba que los principales líderes de las sesiones de entrenamientos estuvieran de vuelta en la sesión clasificatoria final.

La clasificación fue una lucha...

En el grupo A, los cuatro mejores tiempos los marcaron el piloto de Nissan Norman Nato, su compañero de equipo Sacha Fenestraz, Dan Ticktum (NIO 333) y Evans.

Aunque los dos Nissan se habían mostrado discretos en los entrenamientos, salieron a la pista y lograron marcar dos buenos tiempos.

Los dos coches de DS Penske estaban bien situados, pero sus tiempos fueron invalidados debido a una presión incorrecta de los neumáticos. En la Fórmula E hay una presión mínima que respetar y cada equipo la establece en función de la temperatura estimada del neumático en la pista.

Todo quedó en nada o casi nada, pero faltaba algo... Como resultado, Vergne y Vandoorne se vieron relegados a la última fila.

Una carrera que devuelvió la moral

En Mónaco, el fenómeno de la resistencia aerodinámica, que se dejó sentir con fuerza en Sao Paulo y Berlín, fue un poco menos pronunciado. Además, los pilotos se mostraron menos reacios a defender agresivamente, lo que favoreció a las remontadas.

Aunque el ganador, Nick Cassidy, remontó desde la 10ª posición para hacerse con la victoria, hay que destacar los 15 puestos ganados por Vergne para pasar de la 22ª a la séptima posición.

"Hice la mejor carrera que podía hacer, no me arrepiento de nada", dijo el piloto de DS Penske. "Tenía un buen coche y adelanté mucho... Sólo estoy un poco frustrado con el efecto del primer coche de seguridad, porque con el ritmo y la energía que tenía creo que podría entrar al top 5".

"Pero estoy contento de sumar los puntos con el 7º puesto y estoy muy contento de haber limitado los daños".

A los pilotos les espera ahora una doble cita en Yakarta, Indonesia. El año pasado, el único E-Prix del fin de semana lo ganó Evans, por delante de Vergne y Edoardo Mortara.

En el campeonato de pilotos, los cinco primeros, Cassidy, Pascal Wehrlein, Dennis, Evans y Vergne, de cinco equipos diferentes, están todos a 37 puntos de diferencia, lo que augura un final de campaña muy emocionante.

Con nueve carreras disputadas desde enero, la Fórmula E está rompiendo todas las estadísticas con siete poleman diferentes, ninguno de los cuales ha conseguido ganar la carrera que empezó en cabeza. ¿Romperá Yakarta esa racha?