Norris sabe cómo ser campeón de F1, solo necesita hacerlo realidad
El piloto inglés puede estar preparado para ser campeón del mundo de Fórmula 1, y parece tener lo necesario para todo ello.
Lando Norris está en uno de los mejores asientos posibles en la Fórmula 1, con un caramelo que desea morder. A cada segundo que pasa, aprieta con más fuerza, aunque no lo está disfrutando especialmente, pero es un método para sacar su frustración después del toque con Max Verstappen en el Gran Premio de Austria 2024.
Mientras el británico estaba furioso por su incapacidad para adelantar y ganar la carrera, también había una sensación de que en algún lugar de la niebla se asentaba el pensamiento de que ahora sabía lo que tenía que hacer para enfrentarse al campeón del mundo. Habiendo sido testigo de su ascenso en el Gran Circo, con sus altos y bajos, ese fue un momento crucial y algo que continuó desarrollándose durante el resto de la temporada.
Mientras luchaba contra el neerlandés, cada golpe podría haberse sentido como un golpe a sus posibilidades de vencer por el título, pero también deberían haber servido para martillear en casa lo que ahora necesitaba hacer él mismo para ser el nuevo campeón.
Al final de la temporada en el Gran Premio de Abu Dhabi, en una entrevista exclusiva para Motorsport.com, explicó cómo aprendió más durante el 2024 que en sus tres años anteriores compitiendo. Había salido entendiendo más sobre cómo ganar carreras y cómo estar en posición de luchar por un campeonato. Por encima de todo, dijo que aprendió lo que necesitaba para ser un campeón: "Es una mentalidad diferente".
La cuestión es si podrá llevar esa mentalidad al 2025 y mantenerla cuando las cosas no siempre salgan según lo previsto.
La construcción de un futuro campeón del mundo de F1
La entrevista de Lando Norris fue un lugar apropiado, ya que ese fin de semana demostró la resistencia mental para terminar primero y por delante de los Ferrari de Carlos Sainz y Charles Leclerc para asegurar a McLaren el título de constructores, pero el circuito de Yas Marina también fue el escenario en el que se presentó por primera vez a los medios de comunicación, en una mesa redonda.
Era 2017 y le preguntaron por su héroe de la infancia, Valentino Rossi, de quien tenía un póster en la pared de su habitación. En aquel momento era un niño. No muchos años antes de aquella entrevista, cuando tenía siete años, empezó a correr en karts, influido por su hermano mayor, Oliver, y los dos competían en las categorías inferiores, pero pronto se hizo evidente que el menor tenía más talento.
A medida que aumentaba el nivel de la competición, la educación en la escuela de pago, Millfield, en Somerset, pasaba a un segundo plano. Un tutor que viajaba con los hermanos pronto se dio cuenta de que el karting ocupaba la mayor parte del tiempo, y Lando Norris acabaría abandonando sus estudios antes de presentarse a los exámenes.
Su padre, Adam, recurrió a la ayuda de Mark Berryman y Fraser Sheader, de ADD Management, para impulsar la carrera del joven y dirigir su desarrollo. Juntos, trazaron su camino y se abrieron paso a través de las categorías inferiores, y en cuanto su hijo se proclamó campeón, empezó a hacer pruebas en el Gran Circo, lo que le dio ventaja.
El ascenso de Lando Norris fue rápido, pero su grupo directivo necesitaba ayuda extra para abrirle las puertas de la Fórmula 1. Para ello, se pusieron en contacto con Zak Brown, que entonces trabajaba para su propia agencia, JMI, y que más tarde se convertiría en consejero delegado de McLaren Racing.
Fue bajo la supervisión del estadounidense cuando el británico acabaría como piloto junior para el programa de los de Woking. El norteamericano también fue responsable de darle el papel de reserva para 2018, solo para que ascendiera la temporada siguiente como titular, aunque fue en 2024 cuando pasó a ser el último escollo que Max Verstappen tuvo que superar para convertirse en tetracampeón, además de ganar su primera carrera en el Gran Premio de Miami.
Hubo otras victorias también, como la carrera de casa de su rival en el Gran Premio de Países Bajos, una actuación impresionante en el Gran Premio de Singapur, donde ganó por una distancia sideral, y el Gran Premio de Abu Dhabi, decisivo en el campeonato de constructores.
Su actual ritmo de desarrollo se asemeja a sus actuaciones en categorías inferiores, donde aceleraba su aprendizaje de una temporada a otra, con los títulos de karting y algunos en monoplazas. Lando Norris ahora asegura que saber lo que necesita para ser campeón, pero solo tiene que salir a la pista y demostrarlo.
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