Fotos: así fue el test de McLaren F1 con Pato O'Ward en Imola

Tras el Gran Premio de Italia, McLaren F1 viajó a Imola para realizar dos días de pruebas con el MCL60 de 2023. El mexicano Pato O'Ward rodó el miércoles y el jueves por la mañana, mientras el también probador Will Stevens se subió al coche el jueves por la tarde.

Para complicar los planes llegó la lluvia. En cuanto se abrió el pitlane, O'Ward salió a pista para probar las condiciones, pero tras nueve vueltas regresó a boxes. McLaren no quería arriesgarse a un accidente ni a quemar juegos de neumáticos de lluvia, así que prefirió esperar a que el circuito se secara y salir directamente con slicks.

A primera hora de la tarde dejó de llover, lo que hizo albergar esperanzas de que el asfalto pudiera secarse al menos durante la última parte. Así que, pasadas las 16:00h, O'Ward volvió a la pista con neumáticos de lluvia para evaluar la situación, pero regresó a boxes tras sólo dos vueltas: como no había condiciones para rodar, la jornada terminó antes de tiempo. No obstante, Pato mostró un gran entusiasmo por haber rodado por primera vez en la pista de Imola.

Pato O'Ward, McLaren, en la sesión de pruebas de Imola

Foto de: Jacopo Rava

El jueves, bajo un sol radiante, McLaren intentó recuperar el tiempo perdido, condensando el programa en una mañana. O'Ward se mostró enseguida agresivo y al límite en su conducción, tocando la grava en Rivazza y entrando en las curvas con las ruedas humeantes.

Pato O'Ward, McLaren, en el test en Imola

Foto de: Jacopo Rava

O'Ward consiguió completar todo el programa previsto, que consistía en salidas desde parrilla, pruebas de consistencia y vueltas rápidas, tanto con compuestos duros como blandos. A lo largo de la mañana, el mexicano cubrió una distancia de más de 300 km, para un total de unos 370 km sumando los dos días.

Pato O'Ward, McLaren, en el test en Imola

Foto de: Jacopo Rava

Por la tarde, Will Stevens, piloto de simulador y ex piloto de F1 con Marussia en 2015, que actualmente compite en el campeonato WEC con Cadillac, también tuvo la oportunidad de rodar. El inglés se familiarizó con la pista utilizando neumáticos duros, y luego abordó cuatro simulaciones de clasificación con el compuesto blando. En total recorrió 235 km, sin cometer ningún error en particular.