La F1 ya acusa el cambio de los test de Barcelona a Bahrein

Bahrein llevaba mucho tiempo presionando para que los test de pretemporada de la Fórmula 1 se celebraran allí y no en España, como venía siendo habitual.

El punto máximo de insistencia (y de oportunismo) llegó en 2018, cuando una nevada histórica en Barcelona arruinó una jornada de pruebas, y desde el Reino alegaban que en oriente medio el clima era mejor.

Aún se recuerda el tweet que pusieron durante ese día en el que el Circuit de Barcelona-Catalunya se cubría de blanco, una foto del pronóstico de Sakhir (mayormente soleado, a 23ºC) y el de la ciudad condal (nieve y 4ºC).

Además, junto a Mercedes, insistieron en la comparación, presumiendo de sol.

Finalmente no fueron las condiciones climatológicas, sino el coronavirus, lo que provocó el cambio de sede. La COVID-19 obligó a aplazar el GP de Australia y, dado que el mundial arrancará en Bahrein, tenía sentido hacer en el mismo circuito los test, para permitir a los equipos dejar el material allí y reducir no solo el número de viajes ni los gastos de desplazamientos, sino también, en teoría, la propagación del virus.

Sin embargo, a las primeras de cambio, la Fórmula 1 sufrió una consecuencia de hacer las pruebas en Bahrein y no en Barcelona, algo que en nuestro país sería muy extraño que ocurriera (casi tan extraño como que se repitiera la nevada de 2018): una tormenta de arena azotó el circuito.

Rápidamente se convirtió en un tema de conversación, los equipos lo citaron en sus redes sociales, los pilotos hablaban de ello y en redes sociales comenzó a ser tendencia la mítica canción 'Sandstorm' (tormenta de arena, de Darude).

Afortunadamente no perjudicó la fiabilidad de los monoplazas y no redujo la actividad en pista. Con solo tres días de test, los equipos aceptaron las condiciones y rodaron tanto como pudieron, pero sin duda la tormenta de arena ha afectado los datos para poder comparar tanto los números de la jornada con los del GP de Bahrein 2020 como, seguramente, los de estas pruebas con los del próximo gran premio, que se disputa el fin semana del 26 al 28 de este mes.

Eso siempre y cuando no vuelva a repetirse la situación...

Los equipos siempre apoyaron la pretemporada en Barcelona por distancia, por las condiciones del circuito y porque, pese a que suele ser en febrero, en esa zona del país habitualmente no hace tanto frío como en otros puntos de España.

A la primera de cambio, a la Fórmula 1 debería haberle quedado que, si se recupera la normalidad en 2022, las pruebas deberían volver a Montmeló.

Al menos dejó fotos espectaculares la tormenta de arena en los test de Bahrein...

28