Norris ya ve la puerta del título 2024 de F1 cerrada ante Verstappen

Después de haber dejado escapar en Brasil una gran oportunidad de poner al rojo vivo la lucha por el mundial de pilotos, Norris llega a Las Vegas a 62 puntos de Max Verstappen, que este domingo puede proclamarse matemáticamente campeón. Cuando le preguntaron cómo cambia eso su enfoque de cara a la cita de este fin de semana, el inglés de McLaren aseguró que no mucho, aunque sea consciente de su situación.

"Es difícil. No ha cambiado mucho, la verdad. Sé en qué posición estoy ahora, y probablemente tengo menos que perder. La diferencia con Max es por primera vez... probablemente cuando vi la diferencia de puntos entendí cómo estaban las cosas", admitió.

"Creo que después de Brasil fue duro para mí, porque fue el primer momento realista de lo difícil que ya es lograr la primera posición. Estábamos en una buena racha de forma, poco a poco, ya sabes, es difícil remontar muchos puntos a Max, porque él no tuvo ninguna mala carrera, pero yo tuve una semana difícil porque las cosas no salieron como queríamos".

Saliendo desde la pole en Sao Paulo y con Verstappen fuera de los puntos, la diferencia entre ellos podría haberse quedado en menos de 20 puntos con tres grandes premios por delante: "Ahora la lucha por el campeonato se ha quedado en el mayor margen de casi todo el año, así que es difícil".

"Pero eso no cambia mi enfoque. Mi enfoque ha sido el correcto en los últimos fines de semana, he rendido bien. He hecho un buen trabajo. Así que por mi parte, no tengo que cambiar nada, pero creo que probablemente ahora pueda salir y disfrutar un poco más".

El varapalo de Interlagos, admitió Lando Norris, fue duro por dos razones: "Una fue que algo así pasara tan tarde en la temporada. Creo que cuando es al principio de la temporada duele menos porque queda mucho por ver, pero fue casi en un momento decisivo para el campeonato. Ya se han cerrado las puertas".

El joven piloto que desde la última carrera ha cumplido los 25 años reveló que se llevó una bofetada de realidad tras Brasil: "Durante una semana estuve bastante deprimido porque me di cuenta de que las cosas estaban fuera de mi control, ya no necesariamente a mi alcance. Es duro darse cuenta de que, cuando tienes tantas esperanzas y tanta fe en ti mismo, de repente todo se viene abajo. Aprendes a aceptarlo. Así es la vida. He admitido, y lo admití incluso en Miami, que tuve suerte en Miami de lograr la victoria con el Safety Car. Creo que en Brasil aún tuve un poco más de suerte, pero así es la Fórmula 1. Así son las carreras. No me he quejado de ello. La suerte puede estar de tu lado, puede estar del lado de otros. Así es la vida, así que no me importa la suerte, un día te tocará a ti y al siguiente no".

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Por último, cuando DAZN F1 le preguntó si ve el GP de Las Vegas como un jaque en una partida de ajedrez y cuál sería su siguiente movimiento, contestó: "Sinceramente no conozco tan bien el ajedrez, pero probablemente sea jaque. Puedo sobrevivir, puedo pelear y eso es lo que hago, pero en algún momento sabes que no va a salir como quieres".

"Pero nunca se sabe, así que no estoy diciendo que esté terminado y no voy a decirlo hasta que lo esté, pero sabes que está muy lejos de tu alcance, y necesito mucha suerte. Más o menos es como que tengo que ganar las tres carreras y Max abandonar todas. Así que, sí, es jaque y yo estoy solo. Y Max tiene todos sus peones listos para atacarme".