Alonso cambia motor en la segunda carrera de la F1 2022

La temporada 2022 ha estado marcada en rojo en el calendario de Alpine desde hace varios años, sin embargo, parece que las cosas no han empezado como querían, ni en cuanto al rendimiento relacionado con el monoplaza ni con la fiabilidad y potencia del nuevo motor.

Pese a la aparente satisfacción que se respira en el equipo, el chasis del A522 cuenta con una serie de carencias que todavía les aleja de las posiciones de cabeza, mientras que en el lado del nuevo propulsor de Renault, hasta el momento ha dado más problemas que alegrías.

Concluido el Gran Premio de Bahrein en el que Fernando Alonso consiguió cruzar la línea de meta en novena posición, los ingenieros de Alpine descubrieron un problema en la unidad de potencia que estaba integrada en el A522 del piloto asturiano.

A falta de más datos oficiales, el propulsor sufrió una fuga en unos de los retenes del motor y para evitar una avería más importante que podría haber acabado en un abandono, la estructura decidió cambiar el ICE y enviar esa unidad de potencia de vuelta a la fábrica del equipo ubicada en Francia para un análisis más detallado.

"Se volverá a colocar en el grupo de motores para su uso posterior en la temporada. Fernando no será sancionado este fin de semana y el ICE de Esteban no se vio afectado en absoluto por este asunto", explicó Alpine.

De esta forma, Alpine ha confirmado que Alonso está estrenando una unidad de potencia completamente nueva en Yeda este fin de semana, aunque por fortuna no incurrirá en sanción al ser la segunda de la temporada, quedándose todavía dentro de los límites establecidos por la FIA para todo 2022.

En los test de Barcelona, el nuevo motor Renault ya dejó tirado al piloto español al principio de la última jornada de pruebas, debido también según las fuentes del equipo a una fuga hidráulica.

La estructura gala deberá ahora estudiar su nueva unidad de potencia en busca de la razón que hasta este momento ha provocado varias fugas hidráulicas y que, por suerte para ellos, no han afectado de forma directa a sus resultados en pista.

La próxima carrera de la Fórmula 1 será el Gran Premio de Australia que tendrá lugar dentro de dos semanas, concretamente el fin de semana del 10 de abril, un margen suficiente de tiempo para que Alpine y Renault investigan las causas de esas fugas que de repetirse en el futuro podrían ser muy malas noticias tanto para Alonso como para Ocon.