Marini se exprime en el Ranch VR46 y en dos test privados con la Honda en Jerez

Posiblemente Luca Marini no está teniendo el debut que había soñado en su nuevo equipo, el Repsol Honda. Pero lo que nadie podrá echarle en cara al italiano es su empeño y compromiso. Desde que arrancó la temporada el pasado 10 de marzo en Qatar, donde el de Pésaro comprobó que su adaptación a la RC213V 2024 de HRC no iba por el camino correcto, Marini ha viajado ya dos veces hasta el Circuito de Jerez para rodar con la MotoGP junto a parte de su equipo, que le prepara la moto para poder girar aprovechando las jornadas al máximo.

Tras fichar por Honda a finales del pasado año, Marini afrontaba su nueva etapa en un equipo oficial de fábrica con la ilusión y motivación al máximo. Los problemas llegaron ya en la pretemporada. Tras un test en Sepang discreto pero en una línea normal para un debutante en una moto complicada en desarrollo, en el que estuvo siempre entre uno y 1.3 segundos del más rápido, en Qatar en el segundo ensayo oficial de la pretemporada, Marini se desplomó hasta terminar 20º a 1.725 de Pecco Bagnaia, siendo el único piloto que cada jornada de la pretemporada empeoró su distancia con el primero respecto al día anterior.

En el Gran Premio de Qatar acabó el FP1 a 0.9 del primero, pero en la Práctica del sábado cayó a 2.428, y en la Q1 a más de un segundo y medio. En carrera, Marini terminó último la Sprint (a 25s. de Jorge Martín) y la carrera del domingo (a 42s. de Pecco), en la que además, acabó a 24 segundos de su compañero de equipo Joan Mir.

Marini entendió inmediatamente que había que ponerse manos a la obra, pese a que tuvo en la carrera "un problema" técnico, sabe que algo no funciona. "Es obvio, porque iba muy lento, pero había un problema. No puedo decir cuál es, pero era algo sencillo, que se puede solucionar inmediatamente", dijo el mismo domingo de Qatar, un problema que Motorsport.com explicó aquí.

La pasada semana, coincidiendo con un test privado en el que estaba el equipo Honda de pruebas con Stefan Bradl, Marini viajó hasta el sur de España para girar con la RC213V, aprovechando las nuevas normas de concesiones de las que disfruta el equipo de Tokio en MotoGP. Los pilotos titulares, tanto de Honda como de Yamaha, tienen libertad para hacer cuando test quieran y en circuito que les plazca durante la temporada, solo supeditados a un número máximo de neumático.

Luca Marini, Repsol Honda

"Luca necesita rodar y entender la moto, y el momento de hacerlo es ahora, no a final de temporada. Si llega al límite de la dotación de neumáticos antes de lo previsto, da igual, lo que tenga que hacer es ahora el momento", explica a Motorsport. com un miembro del equipo.

Marini, que hoy y mañana comparte pista en Jerez con los equipos de pruebas de HRC, tanto de MotoGP como de SBK, y con los probadores de KTM y Ducati, espera dar un pasito adelante de cara al GP de Portugal, que se celebra este fin de semana.

"Lo mejor que podemos hacer en este momento es seguir pilotando, así que por supuesto es fantástico ir a Portimao", explica Luca en la previa del fin de semana.

"Es una pista muy diferente a la que hemos empezado el año, así que tengo curiosidad por ver cómo va la Honda allí", añade Marini, que admite estar trabajando duro.

"Estamos desarrollando la moto, trabajando con Honda, recopilando información en diferentes circuitos para mejorar. Nuestro objetivo es encontrar un mejor feeling con la moto para ser más competitivos".

Además del test privado de la pasada semana y de las dos jornadas, hoy y mañana, que tiene prevista nuevamente en Jerez con la RC213V 2024, Marini tuvo tiempo también para visitar el pasado sábado el Ranch VR46, y dedicar la jornada a practicar dirt track junto a su hermano Valentino Rossi y otros pilotos de la Academy de Tavullia, como Pecco, Marco Bezzecchi o Franco Morbidelli , tal y como el propio #46 mostró en sus redes sociales.