DS Penske y Vergne, en su pleno de forma en el ePrix de Diriyah

Un ambiente digno de película fantástica, un impresionante espectáculo de drones y una preciosa carrera nocturna, esos fueron los ingredientes que hicieron de la carrera de la Fórmula E en Arabia Saudí todo un éxito. Sin embargo, antes del espectáculo, que fue de un nivel muy alto después de una cita menos dinámica en Ciudad de México hace dos semanas, el día estuvo salpicado por una serie de eventos que pusieron de relieve lo bueno que son los dos DS E-TENSE FE23.

Durante la primera sesión de pruebas del jueves por la tarde, el segundo y tercer puesto de Jean-Eric Vergne y su compañero, Stoffel Vandoorne, marcaron la pauta. Al día siguiente, tras una delicada puesta a punto de sus monoplazas eléctricos, el francés marcó el mejor tiempo en su grupo de clasificación, mientras que el belga no estuvo tan contento, ya que se quedó atrapado en el tráfico en su vuelta rápida y no pudo clasificarse para los cuartos de final.

El galo marcó entonces el giro perfecto para superar a Norman Nato y después a Sergio Sette Camara en la semifinal, y el director del DS Penske, Nicolas Maudit le dijo por la radio: "Acabas de ganar tu billete para la final".

Unos segundos después, cuando Mitch Evans era el 73% favorito para la pole position, Jean-Eric Vergne se mostró imparable y, como un metrónomo, marcó otro tiempo de referencia. Era la 16ª pole position para el francés, que en esa ocasión se convertía en plusmarquista, empatado con Sébastien Buemi.

Una carrera animada, pero controlada del piloto del equipo DS Penske en la que hizo una salida perfecta, manteniéndose en cabeza por delante del neozelandés, que era una amenaza con su Jaguar, y fue de los primeros en activar el modo ataque, con el objetivo de tener un pequeño respiro.

Mientras, Jake Dennis se colocó al mando, y la batalla entre DS Penske y Jaguar continuó por detrás del vigente campeón del mundo, pero los líderes pronto se separaron del pelotón, con una diferencia de rendimiento bastante marcada. Estratégicamente, para no gastar demasiada batería para resistir las embestidas de sus rivales, Jean-Eric Vergne activó su segundo modo ataque, y cedió dos puestos, pero siguió en contacto con el Jaguar y Andretti, pero con planes de ahorro diferentes.

A menudo, a rebufo de Jake Dennis, el francés se vio presionado por Mitch Evans, que aprovechó su segundo modo ataque para mantener su posición de podio, y aunque no se rindió, pero con la mitad de la cita por delante, la cantidad de energía restante era cuestionable. Mitch Evans intentó ponerse en el liderato, pero fue demasiado optimista y se salió de la trazada, con un británico que se ciñó a su plan y se mantuvo al frente.

Por detrás, el galo intentó un movimiento sobre el neozelandés, y llegaron a tocarse, pero Jean-Eric Vergne logró pasar, y tras gastar mucha energía, también le adelantó su compañero, Nick Cassidy. Por delante, Jake Dennis y el francés del DS Penske seguían al frente, separados por poco más de dos segundos, mientras que detrás, la estrategia e Jaguar estaba dando a sus frutos, y en las últimas vueltas, Jean-Eric Vergne tuvo que recurrir a toda su experiencia para defender adecuadamente su plaza, pero lo consiguió y cruzó la meta segundo.

"Cuando sales desde la pole position, por supuesto que quieres", dijo al acabar. "No obstante, viendo cómo se ha desarrollado la carrera, en la que podríamos haber acabado mucho más atrás en la clasificación, hay que estar satisfechos. Este segundo puesto es muy importante para nosotros porque representa el progreso que hemos hecho desde el año pasado, e indica claramente que ahora somos capaces de luchar con los Jaguar y los Porsche".

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