Cuando Alonso llevó a Renault a la cima de la F1 (GP de China 2005)

Hace 18 años, Renault F1 ganó el primero de sus dos títulos de constructores de Fórmula 1. Tras asegurarse el de pilotos a finales de septiembre, Fernando Alonso selló el doblete del equipo en el último gran premio de la temporada, en China.

El ovetense había sido cuarto en el campeonato de pilotos de la temporada 2004, con un segundo y un tercer puesto como mejores resultados, pero en la primera carrera de 2005 había visto cómo su compañero Giancarlo Fisichella se llevaba la victoria y se tenía que conformar con ser tercero.

Sin embargo, ese doble podio auguraba un gran curso para Renault, y así fue. Sin embargo, aunque el duelo prometía ser igualado entre sus dos pilotos, las tres siguientes carreras fueron triunfos de Alonso y abandonos del italiano.

Por lo tanto, Alonso durante todo el curso se lo tuvo que jugar con Kimi Raikkonen al volante de un veloz pero frágil McLaren MP4-20, y con seis victorias y 13 podios (que luego acabarían siendo siete y 15), se proclamó campeón del mundo de pilotos por primera vez en Brasil.

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Tres semanas después, el circuito de Shangai despedía la temporada 2005, y allí el piloto español selló la coronación de la escudería francesa en el mundial por equipos. A esa cita habían llegado Renault (176) y McLaren (174) separados por solo dos puntos, en una era en la que la máxima puntuación de un equipo eran 18 puntos (10 de la victoria y 8 del segundo puesto, no había puntos por vuelta rápida).

Facilitó las cosas Fernando Alonso haciendo la pole con el Renault R25 por delante de su compañero Fisichella, mientras Raikkonen era tercero en clasificación y Montoya, con el otro McLaren, quinto.

Clasificado justo detrás del colombiano, Michael Schumacher sufrió un accidente ya el doming, en la vuelta de camino a la parrilla, tras un malentendido con Christian Albers. Afortunadamente para el germano, pudo arrancar la carrera con el coche de respuesto desde el pitlane, pero ya se había quedado sin opciones.

Fernando Alonso no se dejó sorprender y se impuso el domingo en el GP de China de principio a fin por delante de Kimi Raikkonen (McLaren-Mercedes) y Ralf Schumacher (Toyota). El compañero de equipo del ovetense, Giancarlo Fisichella, terminó cuarto.

Con la octava victoria de la temporada (siete para Alonso y una para Fisichella), las cuentas eran simples: la marca del rombo sumaba 191 puntos, nueve más que McLaren. Así, Renault era campeón de constructores por primera vez, y en el podio (foto principal) lo celebró Alonso junto al mismísimo jefe de equipo, Flavio Briatore. Por su parte, los de Woking cerraron el año con el mal sabor de boca del abandono de Juan Pablo Montoya, por fallo de motor, en la vuelta 24 de la carrera de China.

En ese brillante 2005, los Renault también lograron siete poles (seis para Alonso y una para Fisichella).

Con el doblete de fabricantes y pilotos, Renault ponía fin a la hegemonía de Ferrari y Michael Schumacher, que habían ganado todas las coronas desde 2000 a 2004 en pilotos, y todas en constructores desde 1999. Un año después (en 2006), los de Enstone, con Flavio Briatore al frente, volvían a hacerse con los dos títulos en juego.