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Análisis
Fórmula 1 GP de Arabia Saudí

Declarada la guerra sucia en Red Bull F1: hoy se puede decidir más que su futuro

Marko y los Verstappen en un bando, Christian Horner en el otro. De una reunión hoy en Yeda puede decidirse aún más que el mando en el equipo de F1.

Helmut Marko, Consultor, Red Bull Racing, Sergio Pérez, Red Bull Racing, 2ª posición, Adrian Newey, Director de Tecnología, Red Bull Racing, celebran en Parc Ferme

La noticia de que el eterno asesor de Red Bull Helmut Marko podría verse obligado a abandonar el equipo por presuntas filtraciones a los medios de comunicación es el último giro de una saga increíble.

Pero más allá del impacto de lo que sería un cambio significativo en la cúpula de Red Bull Racing, el desarrollo ha arrojado luz sobre lo que ahora parece ser una guerra total por el control de la escudería.

Lo que en un principio comenzó como la historia de una protesta aislada de una empleada contra el comportamiento del jefe de Red Bull, Christian Horner, se ha transformado en una lucha a muerte que podría decidir el destino del propio equipo de F1.

Marko podría conocer su futuro el sábado, cuando se reúna con el CEO de Red Bull, Oliver Mintzlaff, y tanto si le suspenden como si le obligan a retirarse podría desencadenar la salida Max Verstappen antes de lo previsto. ¿Y dónde dejaría todo eso a Adrian Newey?

Es una situación que podría llevar a que todo el castillo de naipes se derrumbe, ya que los pilares clave que han ayudado a convertir a Red Bull en un conjunto dominante estarían fuera.

Es difícil predecir en estos momentos el rumbo que tomarán las cosas, pero lo que sí es significativo es cómo el último drama en torno a Marko ha dejado al descubierto lo que realmente ha estado pasando entre bastidores.

Desde el Gran Premio de Bahrein, cuando se enviaron correos electrónicos anónimos a altos cargos de la F1 con supuestas pruebas sobre Horner, ha quedado claro que había fuerzas oscuras en juego.

Christian Horner, Team Principal, Red Bull Racing

Christian Horner, director del equipo Red Bull Racing

La información ya se había estado filtrando durante semanas en varias publicaciones que tienen estrechas relaciones con ciertas figuras dentro de la organización de Red Bull.

Entre las filtraciones aparecían supuestas pruebas e información sobre detalles del caso, así como cartas enviadas por partes interesadas que sólo podían haber visto un número limitado de personas.

Luego estaba ese dossier de correos electrónicos anónimos que se envió en el Gran Premio de Bahrein, diseñado deliberadamente para avergonzar a Horner y empujar a Red Bull a replantearse su decisión de apoyarle y desestimar las pruebas en su contra.

Esos correos demostraron que había guerra sucia, pero también dejaron al descubierto algunas pistas sobre quién estaba detrás de todo y por qué no todo era lo que parecía.

Por ejemplo, un análisis de las supuestas pruebas de WhatsApp mostró incoherencias en el formato de los mensajes.

Luego, cuando los propios expertos informáticos de Red Bull y de la F1 se pusieron manos a la obra para tratar de rastrear al remitente del correo electrónico hasta una dirección IP, a pesar de las VPN, se entiende que había otras pistas significativas que delataban al culpable.

Por ejemplo, el formato de la lista de destinatarios. Había dos errores ortográficos - "Hass" y "Dominecali"- y la elección de direcciones personales o profesionales también ofrecía pistas sobre la procedencia de los mensajes.

Dr. Helmut Marko, Consultant, Red Bull Racing, Christian Horner, Team Principal, Red Bull Racing

Dr. Helmut Marko, asesor de Red Bull Racing, Christian Horner, director del equipo Red Bull Racing.

Además, se habla de que la correspondencia adicional de la dirección de correo electrónico anónima también puede haber ofrecido pistas en términos de la formulación de ciertas palabras.

No se ha hecho público si todas las filtraciones y los correos electrónicos de las últimas semanas han procedido de un solo individuo, de diferentes personas o si se trata de un esfuerzo coordinado del grupo.

Sin embargo, lo que es seguro es que demuestra que se ha puesto en marcha una conspiración para echar a Horner.

Como dijo el propio Horner en Arabia Saudí el jueves: "Otros han buscado aprovecharse de ello".

"Por desgracia, la Fórmula 1 es un negocio competitivo. Y ha habido, obviamente, elementos que han buscado beneficiarse de ello. Y ese es quizás el lado no tan bonito de nuestra industria".

Que ahora la situación parezca implicar a Marko sugiere que ya no se trata sólo de un agravio personal, ni de un complot para conseguir mejores condiciones contractuales.

Max Verstappen, Red Bull Racing, with Christian Horner, Team Principal, Red Bull Racing

Max Verstappen, Red Bull Racing, con Christian Horner, director del equipo Red Bull Racing.

Esto se parece cada vez más a una lucha por el control del equipo de F1, en medio del vacío de poder que quedó tras la muerte del fundador de Red Bull, Dietrich Mateschitz, durante el fin de semana del Gran Premio de Estados Unidos de 2022.

Recuerda:

Desde entonces, Horner y Marko lucharon por la atención de Mintzlaff bajo la nueva estructura post-Mateschitz y las divisiones eran claras.

El año pasado, en los prolegómenos del Gran Premio de Estados Unidos, Marko hizo unas declaraciones muy tajantes sobre su futuro y sobre quién dirigía la situación.

"Tengo contrato hasta finales de 2024 y al final es decisión de los accionistas, no de Christian Horner, y al final soy yo quien decide", declaró a Motorsport-Total.com, web hermana de Motorsport.com.

Marko consiguió un nuevo contrato el invierno pasado, pero se ha habla de que no fue en términos tan favorables como antes, lo que alimentó aún más su enfado.

Aunque las tensiones subyacentes entre las dos piezas clave de Red Bull no eran ningún secreto, Horner claramente aún podía aceptar que Marko permaneciera en el equipo porque su aportación era valiosa, y había elementos en su comportamiento que llenaban huecos que no le gustaban. Siempre es prudente mantener a los amigos cerca y a los enemigos aún más cerca.

Pero ahora parece que, a medida que Horner reforzaba su base de poder dentro de Red Bull (habiendo sido clave en los planes de relanzamiento de la escudería RB, y en la creación de Red Bull Powertrains), también aumentaba el malestar de Marko por perder el control que tenía antes.

Así que, cuando a principios de este año se abrió una puerta de oportunidad para exponer a Horner en medio de la denuncia lanzada contra él, era quizás inevitable que algunos lo aprovecharan para sacarle de la escena.

Max Verstappen, Red Bull Racing, with his father Jos Verstappen

Max Verstappen, Red Bull Racing, con su padre Jos Verstappen

Y cualquier intención de cambiar las cosas en la cúpula del equipo parece haber tenido el apoyo del campamento de Verstappen, que ha estado fuertemente unido a Marko en todo lo que ha sucedido.

Fue muy revelador que justo después de que Max Verstappen se bajara del coche en la clasificación de Yeda y se le preguntara sobre los comentarios de Marko en la ORF que él mismo no habría visto, el holandés ofreciera el tipo de respuesta de un largo monólogo que solo se puede dar estando bien informado sobre las cosas.

Verstappen fue aún más firme en su defensa de Marko en entrevistas televisivas más tarde, diciendo que "absolutamente" hará todo lo posible para mantenerlo en su puesto.

Cuando se le preguntó específicamente si se marcharía si Marko era expulsado, Verstappen dijo: "Entonces podríamos tener un gran problema en el equipo. Sí".

Mira todo lo que dijo:

El padre del piloto había dejado caer la bomba después de Bahrein sobre sus temores de que el equipo "explote" si Horner se queda, por lo que la alianza entre el campamento de pilotos y Marko es obvia.

Y Jos Verstappen no ha mostrado signos de retractarse de su teoría de que Red Bull se verá perjudicada si Horner se queda.

En declaraciones a The Daily Mail el sábado, dijo: "Creo que es demasiado tarde para que Christian diga 'déjame en paz'. Pero tiene el apoyo del propietario tailandés, así que creo que se quedará el resto de la temporada".

"Dije que sería malo que se quedara, realmente no es bueno para el equipo toda esta situación".

Puedes leer:

Con Marko y los Verstappen en un bando, y Horner ahora claramente en el otro, la ciudad, como decían en las películas del oeste, probablemente ya no sea lo suficientemente grande para los dos.

Red Bull y Mintzlaff tienen que tomar una decisión importante. Todos los ojos estarán puestos en el motorhome del equipo en el circuito de Yeda y en si, esta noche, veremos a uno de los jefes del equipo salir del paddock por última vez.

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