La nueva chicane artificial de Valencia mejora el atractivo de la Fórmula E

Valencia.- La Fórmula E vuelve a disputar este año sus test de pretemporada en Valencia. Por tercer curso consecutivo, Cheste alberga las pruebas oficiales de todos los equipos, y nuevamente se ha añadido una chicane en la recta principal para simular, en cierto modo, los giros que se encuentran los pilotos en los circuitos habituales del campeonato.

En 2017, los pilotos se quejaron del peligro de esa chicane artificial formada con dos muros de hormigón protegidos por barreras de neumáticos y la Fórmula E reaccionó añadiendo otra al inicio de la recta para reducir la velocidad a la que se llegaba a la segunda. En 2018 se volvió a una y se mejoró su seguridad, y para esta pretemporada de 2019 se mantiene una, pero modificada.

En ella está, según los propios pilotos, la razón de que los mejores tiempos de 2018 (un 1:16.977 que logró Da Costa con el BMW en la última jornada) fueran mejorados al poco de arrancar el primer día de test de este año.

Ahora la chicane tiene una disposición diferente, y permite a los pilotos llegar a mayor velocidad. Es menos revirada y la distancia entre los vértices (que generan tres giros) es mayor. Eso provoca no solo mejores tiempos durante la vuelta (se ha mantenido la longitud de la pista en 3,094km y aun así los registros han bajado más de un segundo y medio), sino también que una y otra vez los pilotos no logren frenar a tiempo y se vean obligados a saltársela por la parte de la pista que deja libre la chicane actual.

Y para otros sale cara. James Calado, en su debut con Jaguar el primer día, sufrió ahí un accidente, y en el segundo fueron Nyck de Vries y Lotterer los que la tocaron, teniendo que volver al box.

El año pasado, los pilotos reducían a fondo, hasta bajar a 30 km/h para hacer la chicane. Este año eso se ha duplicado la velocidad de paso, hasta los 60 km/h.

Con mínimos cambios en los monoplazas, extrañaba esa mayor rapidez, pero el campeón Jean-Eric Vergne fue claro: "Es por la chicane".

En palabras a Motorsport.com declaró: "Se trata de la chicane. El resto es más o menos lo mismo: el coche es el mismo, la potencia también, y a menos que alguien tenga un tren motriz oculto, como un equipo tenía el año pasado, no podemos ir más rápido".

Aunque una chicane artificial es complicado que simule al 100% lo que hay en el calendario, los pilotos parecen satisfechos. "El año pasado era increíblemente lenta esa chicane, ahora está muy bien", declaró Alexander Sims.

Maximilian Günther también estaba encantado por lo que, si la Fórmula E vuelve por cuarto año a Valencia en 2020, parece que se mantendrá este diseño. "El año pasado ya desarrollaron un poco cómo hacer esta chicane, y lo que han hecho para 2019 es realmente bueno", concluyó el propio Günther.

Con información adicional de Alex Kalinauckas

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