Por qué los problemas de Mercedes en la F1 de 2022 son diferentes

Mercedes ha tenido en el pasado muchos inviernos discretos y después llegó a la primera carrera y arrasó con sus rivales.

Incluso en 2021, cuando Mercedes parecía estar totalmente en la cuerda floja al no poder rodar mucho en los test, se las arregló para superar a Red Bull y ganar la primera carrera de la temporada.

Pero a pesar del escepticismo sobre que la escudería alemana oculte su ritmo real, y el temor de que pueda encontrar algo en su fábrica esta semana para desbloquear lo que necesita para estar más al frente, el equipo parece llegar al inicio de la temporada con un problemas.

Esa sensación es la que ha llevado a Lewis Hamilton a declarar que, con el coche tal y como está ahora, no estará en condiciones de ganar carreras.

El año pasado, Mercedes no pudo encontrar la configuración adecuada con el W12 en los test, y esta vez, los pilotos y el propio conjunto, tienen muchas dificultades para hallar velocidad.

El coche está acusando el famoso porpoising mucho peor que sus principales rivales, Red Bull y Ferrari, y Mercedes aún no encuentra el camino para solucionar el problema.

Esta dificultad no solo se encuentra cuando el coche acelera en las rectas, porque el monoplaza sufre cuando toca con el fondo en algunas curvas cuando está al límite, lo que hace indicar que las cosas no van bien a la hora de conseguir una buena carga aerodinámica.

Como dijo su nuevo piloto, George Russell: "Hay mucho potencial en el W13, y creo que nuestros ingenieros van a conseguirlo, solo tenemos que encontrar la manera de desbloquear nuestro rendimiento".

"El porpoising está afectando a nuestra capacidad de poner el coche en la ventana correcta de funcionamiento, y el equipo está trabajando mucho para buscar soluciones. Esta es una temporada larga y creo que nuestra velocidad está ahí, solo tenemos que encontrarla", explicó el británico.

Si Mercedes eleva la altura de la carrocería para evitar que toque el fondo, podrá sacar el máximo potencial al W13, pero eso se hará que sacrifique carga aerodinámica y parte del tiempo por vuelta.

La escudería se encuentra ante un pequeño dilema, ya que cuanto más carga aerodinámica añada al monoplaza -como en la actualización de los test de Bahrein-, cuanto más empuja el coche hacia abajo, mayor es el porpoising, y no mejorará en el tiempo por vuelta.

Como solución provisional, Mercedes podría reducir la carga para disminuir que coche el W13 empuje hacia abajo cuando vaya a alta velocidad.

El equipo se centró mucho en experimentar con los ajustes de la suspensión y las alturas para tratar de encontrar la respuesta, antes de optar al final de la prueba por recortar parte de su suelo y levantar un poco la parte trasera del coche con la esperanza de que eso ayudara.

El director de ingeniería, Andrew Shovlin, sugirió que el equipo había obtenido algunos resultados positivos con sus experimentos de última hora.

"Hemos progresado un poco con el efecto del porpoising, lo que a su vez ha hecho que el coche sea menos difícil de manejar, y también parece que hemos dado un paso en la dirección correcta con la puesta a punto. Todavía hay mucho más por delante si conseguimos mejorar en este aspecto", comentó.

Pero el problema no es solo el porpoising, y es que el peso del coche se ha convertido en otra dificultad para los equipos este año ya que pocos están en dentro del límite del peso mínimo. Se especula que las diferencias en la parrilla son bastante grandes, y se entiende que Alfa Romeo es el monoplaza más ligero.

En la F1, generalmente, unos 10 kilos de peso equivalen a 0,3 segundos en tiempo por vuelta, por lo que cualquier diferencia de masa de unos pocos kilos podría tener un papel muy importante en el rendimiento.

Sin embargo, a pesar de las dificultades en las que se encuentra Mercedes en este momento, la realidad de su situación no es que estén atascados con un coche poco competitivo y no tengan posibilidad de ponerse al día.

Ellos saben que el W13 es prometedor y que tiene la carga aerodinámica necesaria para enfrentarse a los mejores en la parte delantera de la parrilla. Solo tienen que encontrar la forma de dar rienda suelta a sus puntos fuertes y ser capaces de rodar sin que les comprometa el porpoising.

Como Hamilton tenía muy claro al final de la prueba: "Hay un potencial dentro de nuestro coche que podemos conseguirlo. Solo tenemos que ser capaces de extraerlo y solucionar algunos de los contratiempos, que es en lo que estamos trabajando".