Así convenció Brawn a Hamilton de fichar por Mercedes F1

Lewis Hamilton logró su séptimo mundial de F1 el fin de semana pasado en Turquía, lo que le valió para igualar el récord de todos los tiempos de Michael Schumacher. De los siete, seis títulos los consiguió el inglés con Mercedes.

Hamilton dejó McLaren al final de la temporada 2012 para unirse al equipo alemán en lo que en ese momento pareció ser una decisión impactante, pero sus éxitos posteriores demostraron que era la decisión correcta.

Gran parte del trabajo para convencer a Hamilton de que dejara McLaren en 2012 recayó en el presidente no ejecutivo de Mercedes y tres veces campeón del mundo de F1, Niki Lauda, y durante los años siguientes, ambos entablaron un fuerte vínculo de amistad.

Pero Hamilton reveló que incluso después de sus primeras conversaciones con el austriaco, no tenía claro si debía unirse a Mercedes y ligar a ellos su futuro. Y añadió que fue Ross Brawn, entonces director del equipo alemán, quien logró convencerlo.

"Había hablado con Niki en su casa en Mónaco, estaba hablando con él y trataba de convencerme de venir”, dijo Hamilton, reflexionando sobre su decisión de fichar por Mercedes.

"Estoy bastante seguro de que fue el primero con el que hablé; me decía: ‘¡tienes que venir al equipo!".

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“Al principio no estaba convencido. Creo que el momento que realmente me hizo investigar más y convencerme fue cuando Ross vino a la casa de mi madre y se sentó conmigo en la cocina. Tomamos un té y me mostró cuáles eran los planes del equipo”.

“En ese momento tuve un verdadero conocimiento en profundidad de lo que estaba planeando la escudería, los cambios que estaban tratando de hacer. Ese fue realmente el punto clave”.

Un momento muy importante en la decisión de Hamilton de unirse a Mercedes llegó en el Gran Premio de Singapur de 2012, cuando se reunió con Lauda para discutir más detalles sobre el contrato que anunciaron cinco días después de la carrera.

Hamilton dijo que sus conversaciones en Singapur fueron una parte importante en el comienzo de su amistad con el tricampeón del mundo, y ayudaron a aclarar algunas percepciones de cómo era Lauda.

"La parte importante de Singapur es que Niki y yo, quizás más para él, nos dimos cuenta de que teníamos mucho en común", dijo Hamilton.

“Ese fue realmente el comienzo de nuestra amistad, porque recuerdo que me dijo: 'te pareces mucho a mí'. Creo que se dio cuenta de que teníamos mucho más en común de lo que quizás había pensado anteriormente, porque en realidad no habíamos hablado mucho antes de eso. Todo lo que conocíamos se fundamentaba en lo que la gente escribía”.

“Lo digo una y otra vez: llegar a los siete campeonatos es mucho más de lo que pude haber imaginado en mis sueños más locos. Conseguir un mundial fue genial. Obviamente, fue difícil conseguir el segundo, y pasé años trabajando para ayudar al equipo a ganar otro título”.

“Entonces tuve que tomar una gran decisión, si quedarme y seguir avanzando, o cambiar y hacer algo más aventurero. Hice ese acto de fe, y luego hemos conseguido uno tras otro”.

“Cuando tomé la decisión sabía que hacía lo correcto. Pero Dios, ¿sabía que ganaríamos seis mundiales? No”.

“En la vida se dice que tenemos que asegurarnos de dar ese salto de fe, hacer lo que crees que es correcto para ti y no lo que la gente te dice que hagas algo. Debes a analizar los pros y contras, y luego ir por ello”.

“Hay que ir por todo, ya sea bueno o malo".