Max Verstappen domina en las 12 horas virtuales de Bathurst

Max Verstappen se proclamó campeón del mundo de Fórmula 1 en la última cita de la temporada, después de adelantar en el giro final a Lewis Hamilton, con quien llegó empatado a puntos a la carrera decisiva.

Tras eso, pasó un breve periodo de vacaciones con la familia Piquet, pero a principios de este año, el neerlandés regresó a las pistas y fue uno de los pilotos de la vida real que participó en las 24 horas virtuales de Le Mans y las 24 horas de Daytona de iRacing.

Esas dos competiciones no fueron nada bien para el de Red Bull, ya que se estrelló en el circuito de La Sarthe y ni siquiera se pudo poner al volante en la pista de Florida porque su equipo sufrió un tempranero abandono.

Sin embargo, como buen campeón, no descansa y quiere seguir ganando, por lo que se aventuró en una tercera prueba de resistencia virtual, en este caso las 12 horas de Bathurst en iRacing.

Él y su compañero de equipo, Luke Bennett, disputaron la carrera con un McLaren MP4-12C GT3 de la escudería Redline. En la clasificación, la dupla marcó el quinto mejor crono, y fue desde esa posición en la que partió el sábado el neerlandés.

Con una buena salida, Verstappen se puso en la tercera plaza, antes de atacar a Alexander Thiebe, con el Redline Yellow, y al piloto de VRS Coanda Simsport, Joshua Rogers.

El campeón del mundo de Fórmula 1 aprovechó todos los metros del trazado australiano para tomar el liderato, mientras que la otra pareja del Team Redline, Max Benecke y Patrik Holzmann, se colaron en segundo lugar.

Una vez al frente, nada cambió, y Verstappen y Bennett se fueron turnando cada dos horas para cruzar la línea de meta en primera posición tras medio día de competición, con casi un minuto de ventaja sobre Benecke y Holzmann. Rainer Talvar y Phillippe Denes llevaron el BMW M4 GT3 del BS+Competition al último lugar del podio.

Tras saborear el champán virtual, el de Red Bull dejó sus impresiones sobre la cita: "Fue bueno correr, el coche iba muy bien, al igual que el año pasado, a pesar de que teníamos uno diferente".

"Nuestro joven piloto, Luke, pilotó de forma consistente, algo que es bueno de ver. Es bonito que hayamos ganado juntos esta carrera para el equipo Redline", afirmó.

Aunque el #33, convertido ahora al #1 en el Gran Circo, ha vuelto a mostrarse con cierta regularidad en las pistas virtuales este invierno, tendrá que dejar a un lado el ordenador para afrontar el curso en el que defiende la corona mundial. El 23 de febrero es un día que tiene marcado en el calendario, ya que es la fecha de inicio de los test de Fórmula 1 en el Circuit de Barcelona-Catalunya, y no será hasta el 20 de marzo cuando compita en la primera carrera con las nuevas reglas técnicas en la máxima categoría.