El aviso tras el aviso de una conducción temeraria en F1

A la histórica inconsistencia en las sanciones de los comisarios, se le añaden fines de semana donde el peligro se ataja solo a medias, como ocurrió en el GP de Gran Bretaña 2020.

Partimos de la base de que Jean Todt, presidente de la FIA, es a su vez enviado especial de la ONU por la seguridad vial. El francés pretende promover que la competición, sin olvidar que el peligro es inherente en el automovilismo, sea un ejemplo en seguridad, y ha dado algunos pasos para conseguirlo.

Vemos que esta temporada en la F1 se recurre menos al concepto de Safety Car Virtual y se utiliza de manera más frecuente el clásico coche de seguridad, incluso en situaciones en las que parece evitable. Se intuye cierta obsesión por tener todo bajo control, y eso no será algo que critiquemos aquí.

Pero, si la F1 pretende ser un referente, que lo sea en cualquier circunstancia.

Romain Grosjean recibió una bandera blanca y negra (por conducta antideportiva) al defenderse de manera agresiva de Carlos Sainz. El francés se movió en la frenada, que es uno de los movimientos más perseguidos por los problemas que ha generado esa acción en los últimos años.

La explicación de Grosjean:

Grosjean defiende su duros movimientos sobre Sainz y Ricciardo

Desde 2016, la FIA sanciona los movimientos en frenada por el peligro que conllevan al poder generar un accidente a alta velocidad. Lejos de controlarse, Grosjean repitió defensa contra Daniel Ricciardo y, siguiendo el protocolo de esta temporada, el tema pasó a comisarios.

Desde el pasado curso el director de carrera de la F1, Michael Masi, pidió que se utilizara la bandera mitad negra mitad blanca para señalar conductas antideportivas de los pilotos, haciendo un uso como el de las tarjetas amarillas del fútbol.

Tras la primera infracción, si se repite (como ocurrió en Silverstone) son los comisarios los que deciden el castigo, pero en el GP de Gran Bretaña, la sanción impuesta a Grosjean fue un 'warning', un aviso de que había actuado mal, unido a un recordatorio de lo peligroso que es moverse en frenada.

Es decir: ¿se avisa con la bandera blanca y negra a un piloto de que ha cometido una falta, la repite, y lo que se da es otro aviso? ¿Qué conducta va a corregir eso?

En un primer momento se pudo pensar que la segunda infracción la investigaron después de la carrera para evitar la imagen de un piloto recibiendo en pista la bandera negra, pero viendo el 'castigo' posterior esa idea queda totalmente descartada.

Nada en contra de Grosjean pero, ¿no habría sido lo correcto señalar públicamente no solo el peligro que tiene cambiar de dirección mientras un piloto más rápido te va a adelantar, sino el ser, además, reincidente?

La bandera blanca y negra también la recibió el viernes Antonio Giovinazzi cuando volvió al box con el coche roto, dejando numerosas piezas en la pista. ¿Cómo es posible que dos sanciones tan diferentes se sancionen igual? Así lo explicaba Masi: "Algo que sucede en los libres puede ser muy diferente a algo que pasa en la clasificación o la carrera".

"A principios de año, junto con los equipos, después de una revisión de muchas de las penalizaciones ajustamos algunas de ellas. Es un warning más para registrar el incidente en sí mismo dentro del sistema, y como lo de Romain probablemente tenía que ver con esa aclaración, por eso se le dio un warning (advertencia). En acciones como esa, tan al límite, creo que es una decisión justa y equitativa".

Pero, ¿y qué diferencia hay entre una advertencia y la reprimenda que ya se aplicaba en F1? Ambas parecen un tirón de orejas. "La diferencia es que una advertencia es para registrar efectivamente lo ocurrido en la base de datos que tenemos de todas las infracciones. Y se genera un documento, es puramente eso", continúa Masi.

"Sin embargo, con un warning, en realidad se llega a la matriz de una penalización. Entonces, si alguien hace repetidamente lo mismo, se crea un historial. En cuanto a las reprimendas, si suma tres en 12 meses, tendrá sanción en parrilla".

¿Queda claro? A nosotros tampoco. ¿Convence? En absoluto.

En el mismo fin de semana se castigó a George Russell con cinco posiciones en parrilla por no aflojar el ritmo con banderas amarillas. Esa es otra infracción en la que se debe ser muy estricto para evitar dramas del pasado y que, en ocasiones, la F1 pasa de puntillas sobre ella. Esta vez la F1 sí fue un buen ejemplo en eso, pero en lo de Grosjean se escapó una buena oportunidad de dejar las cosas claras. Otra vez.