Ogier se lleva el Montecarlo por apenas dos segundos

Montecarlo (Mónaco).- Sebastien Ogier consiguió la victoria en la 87ª edición del Rally de Montecarlo, tras una intensa y dura batalla con Thierry Neuville al que aventajó por tan sólo dos segundos y dos décimas tras cuatro días de vibrante carrera. El actual campeón del mundo conseguía su sexto Monte consecutivo, séptimo en total, tras superar unos problemas en el acelerador de su Citroen C3 WRC que apunto estuvieron de hacerle perder el rally en la última jornada.

Neuville hizo un rally muy meritorio en un terreno en el que su Hyundai i20 no es el coche más eficaz. Logró rehacerse del error de la segunda jornada en el que perdió casi 20 segundos y meterle presión a Ogier que pasó de sentirse cómodo al principio del rally a terminar sudando la gota gorda.

Ott Tanak completó el podio, marcando un ritmo demoledor durante el tercer y cuarto día del rally. Mucha atención al estonio que ha sido, sin lugar a dudas el piloto más rápido de todos y que puede dar más de un susto en las próximas citas del mundial.

Destacable igualmente ha sido la actuación de Sebastien Loeb, que llegaba a Montecarlo directamente del Dakar, sin apenas haber rodado con el Hyundai i20 y que terminaba el rally en una buena cuarta posición y habiendo conseguido el mejor tiempo absoluto en dos de las especiales del rally.

Tanak desatado, Ogier aguanta

El estonio de Toyota, que perdió todas las posibilidades de luchar por llevarse el rally tras su pinchazo en la segunda jornada, se dedicó a atacar desde el principio de la mañana, al igual que en la jornada del sábado. Tanak terminó el bucle de la mañana marcando sendos scratch, después de haberse impuesto también en todas las especiales del día anterior. Una lástima su pinchazo porque el duelo a tres por la victoria con Ogier y Neuville habría sido épico.

Huérfanos del de Toyota, Seb y Thierry dirimían su particular lucha a la décima. En la primera especial el de Hyundai le limaba un segundo a su rival y en la segunda apenas una décima, pero todo suma y al final de la mañana la diferencia era de 3,2 segundos a favor todavía del campeón del mundo que no se mostraba muy satisfecho con la manera en que se iba desarrollando la mañana. "Ha sido difícil, el coche no está al 100%" protestaba Ogier.

Neuville, pese a todo, tampoco estaba muy contento, sabiendo que necesita un poco más para llevarse el rally: "Está muy difícil" admitió, "los neumáticos se sobrecalientan muy pronto. Derrapan mucho y se puede ir muy rápido en algunas curvas". Aunque ese no era el único problema del belga que además reportó otros problemas en la segunda especial: "No estoy muy contento con mi pilotaje aquí, he tenido que jugar mucho con los mapas por el hielo y también he perdido los frenos. No ha sido un tramo limpio".

Loeb, que había perdido su plaza de podio con Tanak, algo que ya se veía venir el día anterior comparando el ritmo de ambos, era consciente de que estaba dando todo lo que podía, que bastante era después de la poca preparación con la que llegó al rally. "Ha sido un buen tramo, no puedo hacer más" comentó al final del primer bucle.

Neuville aprieta y Ogier con problemas

La batalla continuaba disputándose a la décima en la SS15 en la que se subía al mítico Col de Turini y en la que Thierry Neuville lograba pegarle un gran zarpazo a Ogier que, con problemas en su Citroen veía como el belga se aproximaba y terminaba la especial reduciendo la ventaja con la que contaba el campeón del mundo a sólo 4 décimas.

"Ha sido un buen tramo, especialmente en la parte final" dijo Neuville que estaba exultante después de que, por fin su buen trabajo empezase a tener recompensa, "el coche va muy bien y puedo ir apretando. No sé como estarán los neumáticos, pero creo que tengo suficiente para afrontar el último tramo al máximo y luchar por la victoria".

Ogier, sin embargo, llegaba contrariado a la meta, después de llevar toda la mañana sufriendo problemas en su C3. "Es el acelerador" admitió el francés, "voy tan rápido como puedo, pero no funciona muy bien".

Tanak, empezaba a aflojar un poco, después de tener ya el podio conquistado y veía cómo por primera vez en dos días no marcaba el mejor tiempo en la general. Loeb trataba de afianzar la cuarta plaza y esperar el despiste del de Toyota para terminar en el top tres. "Hemos cambiado un poco los reglajes para estabilizar un poco el coche y va mejor, además tengo más agarre" dijo Seb al llegar a meta.

Ogier soluciona sus problemas

Con todo por decidir en la power stage, la gran duda era saber si Ogier iba a seguir con los problemas en el acelerador de su coche o si iba a poder plantarle cara a Neuville. En la primera parte del tramo, Ogier era más rápido que Neuville, pero el belga era capaz de darle la vuelta a la tortilla y recuperaba en el segundo split. Un espejismo, porque el actual campeón del mundo apretaba durante el resto de la especial y destrozaba las opciones del de Hyundai.

Meeke, que había estado reservando neumáticos durante toda la jornada se llevó la power stage por delante de Ogier, Neuville, Tanak y Suninen que completaban el quinteto que se llevaba los puntos a casa. Ogier encabeza el mundial con 29 puntos, Neuville es segundo con 21 y Tanak es tercero con 17. La próxima cita es el rally de Suecia del 14 al 17 de febrero.

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