Alonso: "Necesitamos un pelín de suerte, pero estoy preparado para ganar"

Fernando Alonso inscribió su nombre en los libros de historia de las carreras estadounidenses en la madrugada del viernes tras una pole de récord en Sebring. El asturiano de Toyota logró parar el reloj en 1:40.124, la vuelta más rápida jamás dada al trazado de Florida, y junto con el buen rendimiento de Kazuki Nakajima llevó al #8 a la pole de las 1.000 millas de Sebring.

“Estoy contento. Las poles aquí en las carreras de resistencia cuentan lo justo porque luego en 8 horas cambiamos las posiciones 23 veces en carrera. Pero te da un punto para el campeonato que luego al final de año nunca se sabe si sirve o no. Unas veces te sale mejor y otras peor, esta vez salió bien y el coche se comportó bien. Luego Kazuki completó el trabajo de manera impecable. Solo tenía que hacer una vuelta sin muchos errores, como dijo él, e hizo el sector rosa en el medio, por lo tanto despacio no fue en ningún momento", comentó Alonso en Sebring. 

“El coche #7 se concentró desde los test de febrero en hacer una vuelta muy rápida y nosotros más en carrera, por lo tanto pensaba que íbamos a tener mas dificultades en clasificación, pero ha salido bien. De cara a la carrera, veremos. Hemos tenido diferentes tipos de test, con más temperatura, con menos... se espera un día caluroso y quizás en esos momentos sufrimos un pelín".

Preguntado por cuál ha sido la clave de esta pole de récord, contestó: "Quizás por la poca presión que teníamos. El coche #8 lo hemos reparado bastante para las tandas largas, con mucha carga de gasolina y la clasificación nos la tomamos para disfrutar, para ver cómo iba con poca gasolina, pero sin la presión de hacer la pole. A veces cuando te calmas un poco y conduces al 98% haces mejores tiempos que al 100% que a veces vas por encima de las posibilidades".

"Tuvimos un segundo intento y pensé que bajaría alguna décimas pero me fui largo en la curva 12 y no pude mejorar. Pensaba que había sido una buena vuelta, pero no sabía si estaba 1º o 2º".

Alonso, que demostró en Le Mans que la llegada de la noche hace salir su mejor rendimiento en resistencia, precisamente cuando las referencias cambian, los puntos de frenada son más complicados de calcular y la temperatura del asfalto baja, asegura que le preocupan las primeras horas de carrera.

"Tengo respeto a las primeras horas de carrera, donde podemos tener algún problema de sobreviraje y les tengo más respeto. Cuando se enfría la pista y llega la noche solemos ganar velocidad. Estoy confiado porque el 70% de la carrera es con frío y de noche", añadió.

"Tengo prestaciones normalmente mejores de noche…. (Risas) Pero ha sido la tónica. En Le Mans en la noche revivimos las posibilidades de ganar, en Daytona es donde mejor íbamos y aquí en los test igual. El calentar los neumáticos suele ser la clave cuando hace un poco de frío y cuando el sol baja parece ser cuando mejor voy".

Pero las 1.000 millas de Sebring, que arrancan este viernes a las 21.00 hora peninsular española (16.00 hora local), serán un nuevo reto intenso para el bicampeón del mundo de F1 y sus compañeros. 

"Tenemos una carrera muy larga por delante, sobre todo por el tráfico. Hasta en la clasificación ha habido una bandera roja. Se supone que habrá muchos coches de seguridad, bandera amarilla en toda la pista y habrá que estar atentos, porque, como hemos visto en Shanghai, a veces estar en una parte u otra del circuito te puede cambiar la carrera. Necesitamos también un pelín de suerte. No estoy preparado para cometer errores, solo para ganar", concluyó.

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