TT Isla de Man: La huella imborrable que deja Raül Torras

El motociclismo español recibió una terrible noticia para cerrar un martes que, a priori, iba a ser recordado por buenas noticias. Raül Torras Martínez, el mejor 'road racer' sin discusión del panorama nacional, falleció en el TT de Isla de Man a causa de un accidente en la carrera de Supertwin, en el último giro de la prueba, cuando peleaba por entrar en el Top 15 y conseguir su mejor resultado en el Tourist Trophy.

La maldita fortuna quiso que el piloto de Sant Hilari Sacalm muriera en la misma jornada en la que había hecho historia horas antes. Y es que, en la carrera de Superstock en la que acabó 20º, consiguió romper por primera vez la barrera de las 125 millas por hora de media en una vuelta del TT, erigiéndose como el piloto español más rápido de la historia de la mítica prueba.

La vida demostró su implacable dureza: de la felicidad más plena por su récord a la tragedia completamente inesperada. Torras se convirtió así en el segundo español que muere en la carrera tras Santi Herrero en 1970, un fallecimiento que provocó que la Real Federación Motociclista Española prohibiera a los pilotos españoles participar en la Isla, algo que se mantiene hasta la fecha. El propio Torras, de hecho, se veía obligado a competir bajo bandera andorrana.

La muerte, que es la primera del TT Isla de Man en 2023 tras la nefasta edición de 2022 en la que fallecieron hasta seis pilotos, sobrevino a Torras en un gran momento de forma. El catalán deja en 'The Mountain Course' un gran legado deportivo, habiendo disputado un total de 21 carreras y consiguiendo 18 Réplicas de Bronce, lo que se sumó a sus actuaciones en otras 'road races' importantes del panorama internacional como la North West 200, el Ulster GP o el Gran Premio de Macao.

Pero deja también, y especialmente, un gran legado humano, consiguiendo tatuar a fuego una huella imborrable en todos los que le conocieron. Porque Raül, de 46 años y Mosso d'Esquadra de profesión era, más allá de un excepcional piloto, un caballero. Con sus rivales en la pista, que guardaron siempre una gran opinión de él, como con periodistas y aficionados, a los que siempre ayudó siempre que se lo pedían.

Con la deportividad y la generosidad por bandera, Torras, entre otras cosas, hizo entender hasta a los más profanos su pasión por las peligrosas 'road races', repudiadas en muchos casos entre varios sectores del propio motociclismo. Alguien que le conoció y que explicó muy bien la filosofía de Raül tras su fallecimiento fue Paul Phillips, gerente de desarrollo de negocios del TT. 

"Raül era un caballero en todos los sentidos. Alguien que vivió para el TT. La última frase de un email reciente que me envió resumía su amor por la carrera: 'Cuenta conmigo para lo que sea. Será un placer, un orgullo y un privilegio ser parte del TT'", reveló Phillips sobre una de sus últimas experiencias con el de Girona.

Las experiencias y la manera de ser de Raül Torras conquistaron hasta al desaparecido Michael Robinson, que le dedicó uno de sus episodios de 'Acento Robinson', su podcast de la Cadena SER, en 2017, antes de su primera participación en Isla de Man. Ya entonces, demostró su amor por la carrera y su respeto hacia sus compañeros de profesión. 

"Podría escribir un libro hablando de la Isla. Es el mito para todo piloto que vaya con una moto de carretera y que le gusten los circuitos y el asfalto. El TT es el súmmum. Estar ahí donde otros [Nieto, Agostini, Surtees...] han pisado y han respirado es un privilegio. Los pilotos [que van hoy en día] son los románticos, los que nos gusta otro tipo de motociclismo, que se vive, que estás muy en contacto con tus compañeros, que no son ni rivales. Estás con los aficionados, con la carretera por la que irás al supermercado cuando abran... Es otro tipo de vivencia", decía entonces.

"En la Isla de Man el mismo aficionado [que te ve] podrá darse después una vuelta en el circuito, ese mismo piloto [contra el que has competido] lo vas a encontrar luego cenando, tomándose una cerveza en el pub, y vas a poder hablar con él. Es todo muy cercano". 

Y es que 'cercano' es una buena manera de definir a Raül, por lo que fue muy importante en vida para mucha gente y por lo que su pérdida es especialmente dolorosa. Pueden dar cuenta de ello, obviamente, sus familiares, o los integrantes del Toll Racing Team, el equipo que creó junto a su amigo Carles Ollé para perseguir un sueño que le había llevado ya a su quinto TT. Pero también muchas personas que hablaban con él en redes sociales, para los que siempre se mostró humano, u otros pilotos, a los que siempre tendió la mano. 

Por ejemplo, Glenn y Andrew Irwin quisieron recordar esa faceta con unas emotivas palabras, rememorando la ayuda que Raül les proporcionó en España duranta la pretemporada: "Raül fue un asistente habitual en nuestro viaje de motocross en la pretemporada. Si no estaba traduciendo a los doctores para Conor Cummins o para mí, estaba dando explicaciones a las empresas de alquiler de coches por cuatro ruedas pinchadas. Todos estamos destrozados, fuiste carismático y apasionado. Orgulloso de llamarte amigo", dijo Glenn.

"Descansa en paz Raül, fuiste un buen tipo que nos sacó de muchos embrollos, especialmente cuando necesitábamos un traductor en España. Te echaremos de menos, amigo", comentó por otra parte Andrew.

Estas son solo algunas muestras de que Torras, en definitiva, dignificaba el motociclismo. No solo cada vez que pilotaba, sino en el trato con sus compañeros, o simplemente cuando hablaba de él, ya que tenía un criterio envidiable para comentar cualquier disciplina. De ello hacía gala siempre que participaba en algún programa o podcast que se lo requería.

Fueron muchos los que pudieron disfrutarle, y que ahora le echarán mucho de menos. Aunque al menos, y aunque suela ser un tópico, en este caso es cierto, se ha ido haciendo lo que más quería y honrando a quienes le conocían.

"Un miembro increíblemente popular de la familia del paddock, la sonrisa de Raúl era contagiosa y su amor por el TT era evidente para cualquiera que tuviera la suerte de conocerlo. Toda la comunidad de Isla de Man sentirá profundamente la pérdida de un caballero tan apasionado y enérgico", comentó la organización en el comunicado de la triste noticia.

"Cuando le preguntaron cuáles eran sus ambiciones en las 'road races', dijo: 'Divertirme con la moto y luchar por acabar entre los 20 primeros en el TT'. En su camino hacia la consecución de sus ambiciones, se convirtió en el español más rápido en correr en la carrera", recordaron las fuentes oficiales. Sirva esto para que ese sea el buen recuerdo que se quede en la memoria colectiva sobre Raül Torras. Descanse en Paz.