Rossi reduce a Ducati o Yamaha el proveedor de VR46 en MotoGP

Aramco VR46 Racing Team, la nueva formación propiedad de Valentino Rossi que completará la parrilla de MotoGP en 2022 tras absorber las plazas del actual Esponsorama Avintia, correrá con motos Ducati o Yamaha, ha asegurado este viernes en Le Mans el legendario piloto italiano.

“Estamos en un buen momento. Todo está confirmado, comenzando por el apoyo de nuestro patrocinador. Estamos hablando con Ducati y Yamaha, ambas opciones tienen pros y contras. Los porcentajes son los mismos, ambos al 50%, pero esta decisión no nos corresponde solo a nosotros”, soltó Valentino al final de la jornada de arranque del Gran Premio de Francia.

“La situación probablemente se desbloqueará en las próximas semanas, creo que lo sabremos todo después de Mugello”, la carrera del Gran Premio de Italia programada para el 30 de mayo.

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De las palabras de Valentino Rossi se desprende que la opción de Aprilia desaparece y que ahora la pelota está en el tejado de Yamaha, ya que los japoneses no quieren ampliar a seis motos su presencia en la parrilla, por lo que si suministran de prototipos a VR46, deberán dejar de hacerlo a Petronas, su socio los tres últimos años.

Ahora mismo todo apunta a que Yamaha y Petronas seguirán de la mano, y que será Ducati quien suministre las motos a Aramco VR46 Racing Team, una opción que, sin embargo, "tiene sus pros y sus contras", como dice Valentino.

En el lado positivo está que Ducati ha tomado ya la decisión de que todas sus motos el año próximo sean modelo 2022 y no haya versiones diferentes, algo que con Yamaha no está asegurado sin una contraprestación económica importante.

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En contra está el hecho de que Ducati pone todas las facilidades del mundo, todo el apoyo técnico y los ingenieros, pero exige subir a Enea Bastianini a una de las dos motos del VR46, lo que es el gran punto de fricción en la negociación, ya que Rossi quiere disponer libremente de esa segunda moto, estando la primera asignada a su hermano Luca Marini, para un eventual salto de Marco Bezzecchi a la clase reina.

Yamaha en el corazón

La relación entre Valentino y Yamaha arranca desde 2003, cuando los japoneses, gracias a Davide Brivio, le convencieron para dejar Honda y correr con ellos. Pese a que han vivido altibajos, como cuando se fue a Ducati en 2011 o el año pasado, cuando le apearon del equipo oficial, la relación se ha mantenido sólida, sobre todo a nivel comercial.

“Yamaha siempre ha estado en nuestro corazón, llevamos más de 15 años con ellos, así que si se dieran las condiciones adecuadas, ¿por qué no?”, dijo recientemente Uccio Salucci, amigo y asistente de Rossi y, en teoría, director del VR46.

Aunque es muy difícil que desde Japón se dé luz verde a un acuerdo con Aramco VR46 Racing Team y se deje en la cuneta a un equipo como Petronas, la opción no está cerrada del todo, ya que Rossi es consciente de la influencia que tiene en la marca de los diapasones y, sobre todo, ese acuerdo permitiría al VR46 disponer de las dos motos libremente, una vía de escape óptima para subir a Bezzecchi o, si llega el caso, rescatar a Franco Morbidelli o al propio Valentino.