Rossi: “Mi Ducati no estaba para ganar; Dovizioso lo logró seis veces este año”
Valentino Rossi insiste en que la Ducati con la que corrió en 2011 y 2012 no era ni mucho menos tan competitiva con la que ahora pilotan Andrea Dovizioso y Jorge Lorenzo.
Valentino Rossi, Ducati Marlboro Team
Ducati Corse
Monza.- El italiano fichó por la marca italiana después de que el mallorquín lograra en 2010 su primera corona de MotoGP en su tercera temporada en la categoría de las motos pesadas, con Yamaha y con Rossi como compañero de equipo.
El corredor de Tavullia decidió entonces emprender una aventura que a nivel propagandístico parecía diseñada para triunfar, y que sin embargo terminó de la peor de las maneras para ambos lados: en los dos cursos que compitió enfundado en el mono rojo, Il Dottore solo acumuló tres podios, los mismos que Lorenzo ya suma en su primer ejercicio como corredor de la marca de Borgo Panigale.
Si en la comparación con su ex vecino de taller ya sale perdiendo, si cruzamos esos mismos números con la que Andrea Dovizioso logró en 2017, el contraste es todavía mayor.
No obstante, aquella Desmosedici que se encontró entonces Rossi no tiene nada que ver con la que Dovi y Lorenzo han estado pilotando.
“Cuando yo fiché por Ducati, aquella moto no estaba para ganar. Dovizioso se impuso seis veces con la de 2017, así que las dos épocas no se puede comparar. Seguro que Jorge será muy competitivo el año que viene”, convino Rossi el pasado fin de semana desde el Rally de Monza.
Se da la circunstancia de que en el año de su debut como punta de lanza del constructor boloñés (2011), el multicampeón terminó el séptimo en la tabla, con 139 puntos, dos más de los que Lorenzo fue capaz de sumar el pasado campeonato, en el que también finalizó en esa séptima plaza.
Sobre sus metas con vistas a 2018, Rossi insiste en que el objetivo no es otro que pelear por el título, aunque al mismo tiempo insiste en que para ello es imprescindible que Yamaha se ponga las pilas.
“El objetivo es pelear por el campeonato. No será fácil porque los rivales son muy fuertes y porque Yamaha tiene que recuperar terreno desde el punto de vista técnico”, recalcó el #46, que ya ha empezado sus vacaciones y que no se volverá a subir a su M1 hasta los test colectivos de Sepang, ya a finales del próximo mes de enero.
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