Pol: “Perdimos la oportunidad de demostrarle al mundo de lo que es capaz KTM”

Spielberg (Austria).- Este domingo por la mañana, el español fue capaz de terminar el séptimo en el warm up, en el que se quedó a solo medio segundo del más rápido (Andrea Dovizioso), un resultado que evidenciaba la buena dirección de KTM en su primer curso en MotoGP.

Sin embargo, esas buenas sensaciones comenzaron a empeorar dramáticamente tres horas más tarde, cuando Polyccio salió del taller del equipo austríaco y en la vuelta que le llevó hasta la parrilla comenzó a sentir que algo no iba bien en el tren delantero de su RC16.

“Noté una vibración tremenda en el disco de freno delantero, y cuando me coloqué, los mecánicos lograron cambiarlo a tiempo. Arranqué la vuelta de formación con el nuevo”, explicó Espargaró, que instantes después sufrió las consecuencias de salir en una de las últimas filas de la parrilla.

“Todo el mundo estaba muy nervioso y alguien me golpeó en el lado derecho, creo que fue Barberá. Habíamos hablado de eso en la Comisión de Seguridad, en Barcelona, después de que Petrucci se cruzara en la salida”, lamentó el joven de los hermanos de Granollers.

“Cuando pasa eso es muy peligroso porque la velocidad es muy alta y la mayoría de las motos están con la rueda delantera levantada. En esas situaciones, si alguien te da es muy fácil caerse”, comentó el de KTM, que a pesar de eso pudo seguir sin mayores problemas, aunque por poco tiempo.

“El golpe solo me hizo perder algunas posiciones, me provocó un fuerte dolor en los dedos, aunque pude continuar. Pero entonces, en el segundo punto de frenada surgió un problema con el freno trasero. Fue una pena que nos pasaran tantas cosas en nuestro gran premio de casa, una carrera en la que, además, estábamos más cerca”, añadió el catalán, que de todas formas celebró la décima posición que alcanzó Mika Kallio, su compañero y habitual probador de KTM.

“En el warm up nos fue muy bien, pero es inútil tratar de imaginar cómo nos hubiera ido en carrera. Mika demostró que podíamos haberlo hecho muy bien, me alegro por él. Terminar entre los diez primeros es lo que se merece esta moto, pero estoy enfadado porque perdimos la oportunidad de demostrar al mundo lo que KTM puede hacer”, zanjó Espargaró, que se fue de los más cabreados de Austria después de haber llegado allí con el mejor resultado hasta la fecha de la marca de las motos naranjas: el noveno lugar que ocupó al cruzar la meta en Brno.

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