Pol Espargaró: "Es más fácil trabajar con KTM que con los japoneses"

Sepang.- El español fue el más rápido en la hoja de tiempos de los pilotos al manillar de la RC16 al final de las tres jornadas de test oficial de la pretemporada MotoGP, aunque en general KTM no haya brillado excesivamente por hacer vueltas rápidas durante este primer ensayo general del curso.

Sin embargo, para Pol Espargaró fue una buena toma de contacto para la reintroducción a la maquinara austríaca.

"Fue el mejor día, porque probamos las cosas grandes. El motor, el chasis y la aerodinámica. Quiero felicitar a KTM por el motor", explicó al final de la jornada.

Por la mañana, Pol bajó al 1.58.7 y estuvo en la parte alta de la hoja de tiempos, hasta que los rivales empezaron a atacar el crono por la tarde, llegando a verse los primeros 1.57 del test.

"Hemos estado entre los cinco primeros casi todo el día, pero en los últimos momentos, todo el mundo quiere dar una vuelta rápida. Pero uno aprende con la edad: lo importante no es terminar los primeros aquí, sino en Portugal", en referencia a la primera carrera de la temporada.

"Tenemos que arrancar el Mundial pensando que podemos pelear por terminar entre los cinco primeros. Las cosas se han hecho bien", diagnostica el corredor.

"Hemos mejorado bastante el motor. Evidentemente que siempre puedes pedir más, pero hay que ir paso a paso. El paso que hemos dado aquí es bueno".

Espargaró cree que los tiempos en una pista tan engomada pueden ser engañosos.

"Es muy fácil ir rápido el tercer día de test en un mismo circuito. En Sepang, en febrero del año pasado, fui el más rápido aquí en términos de ritmo (con la Honda). Lo mismo en Mandalika, y mira después el desastre de temporada que hice", recuerda.

Sobre los puntos débiles y fuertes de la KTM, Pol no quiso dar detalles.

"Estoy contento en general con todos los parámetros".

Pero celebra que en los dos años que estuvo en Honda, la RC16 haya crecido.

"Después del primer día, estoy sorprendido de cómo ha cambiado la moto y cómo ha reaccionado".

"Es mucho más fácil trabajar con este grupo de personas. Conozco a las personas y puedo ir directamente a hablar, sin los filtros que sí hay en las estructuras japonesas. Independientemente de si lo que les digo les va a gustar, o no", atizó a HRC.

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