El SRT confirma la espantada de Petronas en el Mundial de MotoGP

La noticia, adelantada el pasado jueves por Motorsport.com, supone una auténtica espantada de la petrolera malasia, solo tres años después de que desembarcara en la categoría de las motos pesadas, haciendo un ruido tremendo y afirmando estar movida por una gran ambición.

De hecho, el principal objetivo del equipo de MotoGP, que debutó en 2019 con Fabio Quartararo y Franco Morbidelli fue, en ese momento, el de convertirse en el mejor de entre los independientes. Además de las seis victorias logradas entre ambos, el hito más destacable es el subcampeonato alcanzado por Morbidelli en el pasado ejercicio. 

Según ha podido saber Motorsport.com, la decisión de Petronas responde al profundo cambio que la compañía ha llevado cabo recientemente en su cúpula directiva. Según se deduce de esta maniobra, es evidente que la nueva directiva prefiere focalizar sus recursos en otra dirección. 

Mientras los miembros de las escuderías de Moto2 y Moto3 ya están buscando trabajo para el curso que viene, los pertenecientes a la de MotoGP tienen en su gran mayoría asegurado su puesto para 2022. Eso sí, está por ver qué afectaciones tendrá a todos los niveles la marcha del patrocinador principal de la formación.

De entrada, el vínculo con Yamaha, suministrador de las motos en la categoría de las motos pesadas, se ha reducido a un acuerdo de mínimos, en el que el SRT renuncia a la M1 oficial que le correspondía, para disponer de dos prototipos de los considerados estándar. 

“Comenzamos esta asociación con SIC (Sepang International Circuit) para mostrar nuestras capacidades de I + D y estamos orgullosos de que Petronas haya sido fundamental para establecer al equipo en la posición de aspirante al campeonato. Juntos, hemos protagonizado algunos momentos muy destacados en esta disciplina, que confirman que hemos logrado lo que nos propusimos hacer. Por ello, sentimos que es el momento adecuado para concluir esta asociación”, se lee en el comunicado de SIC, propietario del SRT. 

Un efecto derivado de los muchos de este jarrón de agua fría es la dificultad que se están encontrando los ejecutivos del SRT para cerrar una alineación de pilotos convincente, una vez se haya confirmado la retirada de Valentino Rossi y la promoción de Franco Morbidelli al garaje oficial de Yamaha. El primero en la lista es Darryn Binder, que de confirmarse daría el salto directamente desde Moto3, al igual que en su día hizo Jack Miller.