Márquez no se detiene: "hay que seguir dando el máximo por el equipo y por todo el grupo de trabajo"

El piloto de Ducati se coronó campeón del mundo alcanzado una cifra récord de puntos en una sola temporada, 541, doscientos más que su más inmediato perseguidor, y con un margen nunca visto hasta ahora, seis carreras antes de cerrar la temporada. De la mano Marc Márquez, ganador de 11 carreras y 14 sprint, Ducati se adjudicado ya el título de campeón de constructores con 326 puntos de ventaja sobre Aprilia, y solo está en juego ya la corona por equipos, en la que también lidera el equipo oficial de la casa italiana, con 328 puntos de ventaja sobre el Gresini Racing, una tabla en la que es tercero el VR46 copando el podio las tres estructuras que compiten con motos de Borgo Panigale.

Cualquiera tras batir todas estas marcas y récords podría levantar el pie del acelerador y disfrutar de lo conseguido, pero en la previa del Gran Premio de Indonesia, que se celebra este fin de semana en Lombok, Marc Márquez encuentra motivación para seguir peleando por objetivos, pese a que las celebraciones por la corona mundial fueron intensas.

"Las últimas 72 horas han sido simplemente increíbles", admite el campeón nada más tomar tierra en Lombok.

"El domingo fue un día que recordaré para siempre. Hubo momentos muy emotivos, de una emoción muy intensa y, sobre todo, de alegría y paz", recalcó el catalán, que no lograba ganar desde 2019, justo antes de la grave lesión de 2020.

El de Ducati fue aclamado por los fans a su llegada a la capital de esta diminuta isla enclavada en el Mar de Bali. "Llego a Mandalika todavía con todas esas sensaciones encima, que serán un impulso extra para mantener la concentración", apunta el #93 buscando la manera de seguir enchufado tras lograr el gran objetivo.

"Hay que seguir dando el máximo por el equipo y por todo el grupo de trabajo. El título por equipos también está ya muy cerca", recuerda.

El Circuito de Mandalika no es de especial buen recuerdo para Marc, ya que nunca ha ganado aquí y en 2022 sufrió una fuerte caída que le reprodujo los problemas de visión doble que le han perseguido desde 2011 cuando aún competía en Moto2.

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